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“Lo positivo también es contagioso”

Luis Jorge Arnau

“Lo positivo también es contagioso”

Luis Jorge Arnau

Escritor


Creando oportunidades

Luis Jorge Arnau

Luis Jorge Arnau es editor, asesor de empresas y fundador de la revista Mexicanísimo, proyecto que desde hace 18 años se dedica a visibilizar lo que se hace bien en México, sin connotaciones políticas. Ingeniero industrial de formación, Arnau dejó el sector empresarial para enfocarse en la difusión de historias que fortalecen la identidad y el orgullo nacional, convencido de que el país necesita reconciliarse consigo mismo y reconocer su riqueza biocultural y multicultural.

Bajo su liderazgo, Mexicanísimo ha publicado más de 127 ediciones, libros como “El México que queremos” y “Las mil y una frases mexicanas”, y ha impulsado la participación de voces de todo el país, promoviendo la descentralización cultural. Arnau ha entrevistado a figuras como Rafael Cauduro y Miguel León Portilla, y ha impulsado la visibilización de mujeres y científicos mexicanos. Además de su labor editorial, se define como “aplaudidor” de quienes contribuyen positivamente a la sociedad y disfruta plenamente su faceta de abuelo.


Transcripción

00:00
Luis Jorge Arnau. Soy Luis Jorge Arnau. Soy editor. Soy asesor de empresas. Actualmente se usa mucho el término multitask, pues es lo que antes conocíamos como el chambitas, entonces eso soy yo. Soy una persona que empecé como industrial, trabajaba yo en empresas y hace 18 años decidí que había que buscar lo que vale la pena de este país y fundar una revista que se llama Mexicanísimo, que lo que se dedica principalmente, es a hablar de lo que se hace bien en México, sin ninguna connotación política. Lo hace bien una persona en la calle, o lo hace bien una persona en un escritorio, o lo hace bien en el campo. Hay que verlo, hay que asomarnos, porque esas historias son las que nos nos forman. Y yo decidí que me iba a convertir en un aplaudidor. Y esa quizá es mi profesión actual, además de ser abuelo, que me encanta ser aplaudidor. Me gusta reconocer a la gente que está haciendo cosas bien. Fuimos a ver a una persona, un asesor que me dijo uy, si vas a hablar bien de México, te va a alcanzar para tres revistas y ya llevo 127. Es esta visión de México no tiene mucho de qué presumir. Y con el perdón, pues es una estupidez. O sea, es uno de los países más ricos bioculturalmente hablando, con una enorme población. El país de habla hispana más grande. Tenemos una gran variedad de culturas, tiene 36 grupos distintos. Tenemos 364 lenguas nacionales, pero tenemos esta visión de, yo soy poquito y eso es algo que tenemos que quitarnos desde los que estamos aquí, esta visión de yo no puedo, el usted perdone, esta educación que se nos ha dado de calladito te ves más bonito y este tipo de cosas que son malas para este país. Lo que busca este esfuerzo editorial que hacemos es, la palabra reconciliación tiene muchas cosas fundamentales que olvidamos, el término re-conciliar, que es traer a concilio, volvernos a acercar a la gente, que es algo que hacemos frecuentemente con las familias, con la esposa, con los hijos, y todos conocemos un tío que se queja de todo, de todo, porque llueve, porque agua, porque el fút, de todo, ese ya sabes cuál es la crítica que va a traer hoy ya es lo único. Pero sin embargo, nos falta sentarnos con alguien que te diga oye, ¿te has dado cuenta que esto está mejor? ¿Te has dado cuenta que hay un científico mexicano que está haciendo esto? ¿Te has dado cuenta que hay opciones por aquí, por acá? Esa es la parte que tiene de rico este país y que la editorial ha tratado de resaltar, porque si no, si nos acostumbramos a vivir en el lodo, al final todos vamos a quedar enlodados. Al final no hay salida para el que se sienta en el lodo y dice es que esto es un lodazal. Sentarse no evita el lodo, llorar no evita el lodo, pues hay que pararse, hay que limpiar, hay que quitar el agua, hay que sacudirnos, hay que cambiarnos, hay que reconocer otros caminos. Y esa parte es quizá la parte más ruda, porque a veces parece mentira, pero se le da menos valor al que aplaude que al que critica.

03:21
Luis Jorge Arnau. Y cuando se nos olvida ser negativos, cuando se nos olvida ser el aguafiestas, somos extraordinarios. Cuando te dedicas a buscarle lo bueno te das cuenta que hay muchas sombras por ahí. Bueno ok, pero la luz es suficientemente buena. La luz nos permite evitar las sombras, nos permite convivir con ellas y entender que este país tiene potencial.

04:26
Elizabeth. Qué tal Luis Jorge. Mi nombre es Elizabeth Martínez y como sabemos, estamos en plena celebración de los 700 años de la fundación de México-Tenochtitlán ¿Qué historia consideras que fue importante y que hoy hemos olvidado?

04:42
Luis Jorge Arnau. Hay historias preciosas en este libro que hicimos, encontramos muchas y te voy a mencionar dos rápidas como para ver. En 1629 estuvimos a punto de abandonar la Ciudad de México. Llevaba cinco años la ciudad inundada, cinco años. Se consideraba que no había manera de quitar la peste y todo esto, y había varias propuestas de sacar la capital, propuestas que ahorita les puede dar un poco de risa, porque pues la ciudad era así, entonces había quien decía que había que llevársela a San Ángel o a Tacubaya, imagínense que lejos, pero bueno, era entonces. Pero hay esa historia y el trabajo que se estuvo haciendo para tratar de desazolvar, limpiar, arreglar una ciudad que estaba colapsada. Hay otra ciudad, hay otras cosas. La mujer más rica de México se llama Isabel Moctezuma. Hija de Moctezuma II, estuvo casada con Cuitláhuac como 15 minutos porque se le murió pronto. Después estuvo casada con Cuauhtémoc. Y Moctezuma se le encargó a Cortés, le dijo oye, pues porque cuando lo mataron y todo esto, y le dieron lo que se llamaba entonces una encomienda, porque ya podríamos platicar mucho de la colonia y todo esto, pero ¿qué era la encomienda? Se le daban unos terrenos a la gente que era de la realeza entonces y a Isabel Moctezuma se le dio una pequeña encomienda que iba más o menos desde Polanco hasta Querétaro. Imagínense lo que esos territorios. Y la discusión por su herencia y los pleitos en la familia duró como siete telenovelas. Y son historias muy simpáticas. Ella, Imagínense, hija de Moctezuma, casada con Cuitláhuac, casada con Cuauhtémoc, tuvo una hija con Cortés, o sea, esa sí estuvo en el centro de la acción y era la mujer más rica de México. Y son cosas que que son interesantes hasta por saber un poco más de la gente o por ejemplo, hay una historia simpatiquísima, la charrería no viene de Jalisco. La charrería empezó en Puebla y empezó con el Beato de Aparicio, Sebastián de Aparicio, que él llegó a México y fue el primero que empezó a usar los caballos para domar y para cazar, para mantener las reses. Y fue el primero que hizo una vía, imagínense, hablando de las cadenas hoy de mensajería. Él fue el primero que creó una compañía que llevaba cosas de Veracruz a México en caminos de terracería y con carretas. O sea fue el primer empresario mexicano y después para que veamos lo maravilloso de esto, después dejó todo, dejó todo para dedicarse a la Iglesia, para dedicarse a ser el más humilde en su congregación. Y podemos hablar de muchas historias. No sé si ustedes sabían, las imprentas que llegaron a México en realidad la soportaban las mujeres, porque Juan Pablos, que fue el primer editor, murió muy pronto y fue su esposa la que se dedicó a hacer la impresora, la primera impresora de México. Nada más que con esta situación de que nada más se hablaba de los hombres, se nos olvidan esos personajes. O uno de los mineros más grandes que hubo en México que se apellidaba Fagoaga, también murió y a la muerte de él, fue la esposa la que concentró todas estas riquezas. Hay muchas historias simpáticas de cómo se crearon las primeras ciudades. Como Nuevo León, los primeros fundadores de Nuevo León eran tlaxcaltecas, a los que se les dio algunas concesiones para que fueran al norte. Imagínense lo que era ir de México a Monterrey, 900 kilómetros para fundar una colonia ahí y todo esto. Y esas cosas son bonitas, quizás lo que pasa es que no nos las ponen en las redes sociales o no hemos hecho demasiadas películas sobre eso, pero son cosas apasionantes.

08:39
Luis Jorge Arnau. Si nos asomamos y le rascamos van a encontrar las historias de los primeros médicos, de las primeras enfermeras, de los primeros pintores, de la gente. El padre del mestizaje, realmente el padre el mestizaje, se llama Gonzalo Guerrero. Gonzalo Guerrero llegó a México, bueno, se hundió su barco y él llegó junto con otras dos personas, y fueron prisioneros de los mayas. Y cuando llegó, cuando llegaron los españoles, él decidió ya no irse con los españoles porque él ya tenía esposa e hijos y él ya se había asumido como maya y luchó contra los españoles y murió en la batalla contra los españoles. Pero los primeros mestizos que tenemos son sus hijos. El problema que pasó, por lo que tenemos un hueco histórico, es porque hubo una etapa que se llamaba el nacionalismo revolucionario, que empezó desde después de la revolución, cuando Cárdenas y después Calles, empezaron a tratar de integrarnos en una sola personalidad. Y entonces los murales, todo el trabajo de México como nación era, hablemos de este México, lo de atrás no importa. Y hubo dos partes muy lesionadas por eso, por no querer irnos a la historia, la parte del virreinato obviamente, y la parte del porfiriato, que también hay que hablar de ella, de la cual, pues como entonces no se hablaba de lo de atrás, eso es como en las familias, cuando nadie quiere hablar del tío que era un viejero y que iba para acá y para allá. De pronto el tío desapareció, y de pronto oye, ¿y ese tío? No, pues no teníamos un tío y pues si, lo de atrás, lo de atrás no importa y en realidad tendríamos que irnos muy atrás. La gente después lo que hizo fue tratar de reintegrarse con las culturas precolombinas, que en realidad no éramos un país antes, o sea, antes éramos 30, 35 pequeños países. México en realidad se empezó a a formar con la unión de el mestizaje y la gente que llegó de España con los que estaban aquí, porque los Tarascos no tenían nada que ver con los mayas y no tenían nada que ver con los aztecas, eran otros países. Si hoy estuviéramos hablando de eso, México sería 32 o 35 países. No lo sé. Pero entonces este querer integrar le pasó factura a áreas muy importantes, se salvaron muy pocos, insisto, se salvó Sor Juana, se salvaron, pero contados. De los demás se habla muy poco, que solamente nos los sabemos por los nombres de las calles. Tenemos una memoria cartográfica a nivel de historia. Luego no sabemos ni quién fue Alencastre, pero en Alencastre te das vuelta a la izquierda y llegas. Y entonces el virrey Alencastre, que fue un virrey muy importante, pues no se habla de él. Y creo que es bueno y es bueno también reconocer lo que se hizo mal, aprender a entender eso porque nos ayuda a cambiarlo. Borrar nuestro pasado no es posible.

12:04
Luis Jorge Arnau. Se puede aprender de él.

12:38
Carolina. Hola mucho gusto, soy Carolina Madrid. Antes que nada, me gustaría agradecerte por ser parte de esta cultura y de recordarnos que efectivamente no todo es malo en México. Y considerando justamente que los mexicanos somos muy reconocidos por nuestra forma de expresión y de hablar. ¿Para ti cuáles serían las expresiones más icónicas de nuestra cultura?

13:03
Luis Jorge Arnau. Uy. Hablando, México tiene un lugar muy especial, porque somos muy chidos, porque nos encanta hablar de palabras que ni siquiera existen en los diccionarios. Alguna vez una persona me dijo en redes, ¿por qué usas tantas palabras que no están autorizadas por la RAE? Le digo porque la RAE no ha venido a una cantina. Lo que tiene que hacer la RAE es venir a la cantina para que vea el otro lenguaje. México tiene un lenguaje riquísimo, que parte desde las culturas que había antes. El famoso apapacho. Los apapachos, es una palabra náhuatl. Y no hay palabra en el español más bonita que esa y según quién los apapache. Pero es una palabra maravillosa. Uno a veces no necesita un abrazo, necesita un apapacho y es de veras mucho más. Con el abrazo me conformo, pero un apapacho ayudaría mucho. Hay frases, hay una frase de Cantinflas que es increíble. “Hay momentos en la vida que son verdaderamente momentáneos”. O sea, ¿y eso qué es? O Frida diciendo “Pies para que los quiero, si tengo alas para volar”. Y estas, nada más es cosa de ir a la otra RAE que es la que está en los bares, en las cantinas, en los mercados, en los mercados hay los mecapales y, todas estas palabras que son lo que nos hace sabrosos. Y aquí el término sabroso es muy amplio, porque así somos, donde nos acerca también entre nosotros, hay palabras que nos acercan, que son imposibles de decir con otra cosa. El chamaquito y todas estas cosas que son palabras que son ricas y que podríamos hablar mucho de ellas. Hicimos otro libro que se llama Las mil y una frases mexicanas, que lo hicimos a propósito porque los lunes, si se acuerdan los que estuvieron en la escuela, que espero que hayan sido todos. Los lunes, las maestras en los honores a la bandera, o dicen una frase de Churchill o la tienen en el periódico mural, una de Mandela y se les olvidan las frases mexicanas y hay frases mexicanas de Octavio Paz, de Cantinflas, de Cri cri, del que ustedes quieran, que son muy bonitas y que ayudan a a entendernos. E hicimos este libro, que lo usan mucho en muchas escuelas, para mostrar que México también piensa y que tenemos ideas claras, simpáticas. México es difícil que no se salga por alguna cosa cómica o entretenida, pero que es importante manejarlo y es bueno manejarlo así. Y todos tenemos unas pequeñas palabras que tenemos guardadas por ahí para nombrar cosas que son maravillosas. El mismo aguacate es una palabra, también es tarasca, pero son palabras que hoy ya están ahí y que nos nos ponen en un lugar en el mundo. Y el porque el mundo sabe de nosotros no tenemos que engañarnos, el mundo sabe de México. Gracias.

16:35
Darío. Hola Luis Jorge, un gusto en conocerte. Mi nombre es Darío García. Yo tengo una pregunta en particular. ¿Tú crees que contar buenas noticias ayuda a transformar un país como el de nosotros?

16:51
Luis Jorge Arnau. Yo creo que sí. Creo que México requiere hablar de sus buenas noticias. Requiere mostrar las historias de éxito. Este programa que tiene BBVA, ha hecho una maravilla en ese sentido y nos gustan estas cuestiones donde hablamos de cosas valiosas porque es lo que nos va a sacar del agujero. Hay gente que me dice yo ya no leo el periódico, ya no me meto a las redes, porque todo es negativo. Sí, cierto. Y a mí me encanta cuando de pronto ven en Twitter o en Instagram que dice oigan, pongan fotos bonitas y hay un montón de gente que saca fotos de Acapulco, de Ixtapa, de lo que ustedes quieran. Bueno, pues eso renueva un poco la confianza. A dónde recomiendas ir a un amigo, pues a un lugar bonito. Bueno, eso es lo que pasa con México. Yo creo que en México, lo que tenemos que hacer es creérnosla. Lo que tenemos que hacer es creer que el país puede, pese a todo. Cuando nosotros empezamos hacer también libros, primero hicimos un libro de fotografía que se llamaba El México que queremos y lo que hicimos fue, que es un poco la idea de la editorial, fue abrir la convocatoria y decirle a la gente manda tus fotos, manda las fotos de tu ciudad, de tu pueblo, de lugares a los que tú vas. Digo, hay fotógrafos extraordinarios que merecen tener diez libros, pero nosotros queríamos ir por el otro lado, que es, hagamos un libro que integre miradas de toda la gente, que integre miradas de Puebla, de Pachuca, de Monterrey y lo que es increíble, es la cantidad de fotos que mandaron gente de sus valores propios, algunas que no tienen la calidad para salir en un libro, porque estaba la señora que mandó la foto de su niño que estaba muy simpático el niño, pero pues no, eso no puede salir, pero es increíble. Y ese libro, el México que queremos, después ya nos ha dado para seis o siete libros, creo que ya no sé cuántos son, donde hemos hablado de México de la A a la Z, México de colores, México, porque había una sección, hay una sección en mexicanísimo, la que se llamaba México es, donde poníamos un adjetivo. México es verde y la gente mandaba fotos, y es impresionante la cantidad de visiones de verde que hay. Y bueno, puede ser más fácil. Los primeros fue México es verde, luego México es blanco, México es rojo. Pero cuando ponías México es kitsch, y salía el típico taxi con su palanca de velocidades, con la bola de billar del número ocho y salían muchas cosas de este kitsch mexicano que tenemos y que podemos ver en las calles. Y entonces te das cuenta de la riqueza que había y hemos puesto 125, 126 adjetivos y nos damos cuenta de la enorme riqueza que hay ahí. Lo que hay que hacer es exponerla para que la gente pueda asomarse a su México, el México que a veces no vemos, porque a lo mejor La Paz está muy lejos o Tijuana, pero que podríamos acercarnos. Y luego, una cosa que tratamos hacer muchos nosotros, que es favorecer el trabajo en los estados y dejar que sean los estados los que manden sus fotos.

19:51
Luis Jorge Arnau. ¿Para qué? Pues para que veamos cuál es la riqueza de San Luis Potosí, que no vemos, más que los potosinos. Entonces los potosinos pueden mostrar lo que tienen, como pueden mostrarlo los duranguenses, etcétera. Entonces eso, nos pone mucho más contentos que hablar del último robo y del gobernador que está saqueando aquí y de todo eso, que parece que es como que nos gusta echarnos vinagre en la herida. Es esta situación masoquista que a veces tenemos muy grabada, pero que se puede quitar. Hay ejemplos reales, de sociedades que han trabajado fuertemente en contra de este masoquismo divertido que creemos. El chiste es saber quién hace la noticia más fea de todas. Hagamos visible lo bonito y lo bonito créanme que es contagioso. Presume de tu casa. Ok, muy bien. México es tu casa. Gracias.

21:22
Osvaldo. Hola, ¿qué tal? Mucho gusto. Yo soy Osvaldo Ángeles. Me surge la pregunta, ¿en qué momento usted decide que es el momento, o es el timing o la oportunidad, de contar las historias más poderosas que tiene nuestro país?

21:38
Luis Jorge Arnau. Ahora ya casi no hay periódicos, pero en mis tiempos, no, no es cierto. Pero cuando empecé una cosa que pasaba es que la buena noticia la ponían en la página 18, abajo del sudoku, chiquito. Hoy las estaciones de radio dicen y hoy vamos a darles la buena noticia, como si fuera una de 500. Le echaron seis horas al problema de la inundación, al problema de los políticos, a los robos, a los no sé qué. Y de pronto, y ahora la buena noticia, Chuchito tiene un diente nuevo. O sea, se desbalancea esta visión. Entonces en Mexicanísimo dijimos a ver, vamos a darle ocho columnas a lo bueno. Si hay tantos medios que hablan de lo malo y lo hacen bien, ahí hay análisis muy críticos, muy correctos. Bueno, pues démosle espacio a lo bueno, démosle espacio descaradamente a lo bueno. Y entonces hicimos una estructura en la revista, donde hay una sección de naturaleza, una sección de lo simpático, una sección de parte histórica, una sección para hablar de un lugar. Y vamos a hablar de eso, una sección para gente haciendo las cosas bien. Y entonces te obligas a buscar la buena noticia. No es relleno. Hoy los medios, todavía hoy, aunque hay cada vez menos periódicos, pero también los medios electrónicos de todo tipo, las redes sociales, la noticia buena sigue siendo un relleno. Y es terrorífico. Y les puedo mostrar de la ventaja que hay, con un ejemplo que está pasando en estos días donde hay un ciclista mexicano que está ganando en Europa y hoy ya todos somos ciclistas, ya todos sabemos que si la caja de cambios y que si la no sé. Y a lo mejor en la vida, a lo mejor ni siquiera sabemos andar en bicicleta. Pero nos enamoró y ahora todos somos Del Toro. Y no solamente por Guillermo el del cine, sino por el torito que está en la bicicleta. Y cuando escuchamos historias de estas, la gente se contagia y dice ah caray, pues si puedo. Tenemos tradiciones muy fuertes en clavados, tradiciones muy fuertes en caminata, que se ha perdido, en el boxeo, que son cosas que a la gente les contagia y entonces tú quieres emular. Bueno, esto que estoy diciendo, el deporte, también pasa en la ciencia. Hay gente que dice no, yo no me quiero dedicar a la ciencia porque no hay nadie, no hay ningún mexicano y eso es falso, o yo no me quiero dedicar a esto. Lo que hay que hacer es pasarlo. Entonces cuándo me decidí, cuando vimos que si hay algo que está devaluado en este país es la difusión de buenas noticias, lo cual hace reconocer más, a los que hacen cosas bien, porque las están haciendo sin necesidad del aplauso. Las hacen no para salir en la tele, no para salir en los medios. Pero es obligación de los medios sacarlos. Es obligación de los medios resaltar lo valioso del país, porque si no, nada tiene sentido. Voy a comentar sobre algunas de las historias, muy rápido, de las historias impresionantes que hemos hecho. Me tocó entrevistar a Rafael Cauduro, pintor que hizo un mural, que a los que están en la Ciudad de México se los recomiendo ampliamente, que está dentro en la Suprema Corte de Justicia, en la escalera de la Suprema Corte de Justicia, que habla sobre los vicios de la justicia y le ofrecieron que hiciera un mural.

24:40
Luis Jorge Arnau. Él dijo lo voy a hacer, si me permiten que yo hable de cómo vemos la gente a la justicia. Hizo un mural excepcional, duro, rudo, que les recuerda a la gente que está ahí adentro, su compromiso con la sociedad. Pero Cauduro enfermó, enfermó mucho y estaba realmente a punto de morir, falleció hace poco, cuando nos dio la entrevista. Tenía un problema enorme ya para comunicarse, no podía hablar, pero sin embargo él decía yo quiero hablar. Y yo le decía ¿quieres que te pase las preguntas por escrito? No, no, no, siéntate. Y platicamos dos horas en su casa en Cuernavaca, y yo veía un hombre enfermo, enfermo ya para morir, con ganas de seguir aportando y que seguía haciendo el esfuerzo por pintar y que seguía trabajando por lo que cree. A mí es de las entrevistas que me dejó impactado. Es un ser humano maravilloso. Y otra más. Tuve la oportunidad de entrevistar a Miguel León Portilla. Miguel León Portilla, uno de los sabios más importantes de este país, quizá el personaje mexicano que más títulos honoris causa tiene, desde Viena hasta, de todos lados tiene. Cuando estábamos en la entrevista, fuimos a entrevistarlo Mónica y yo, Mónica fue fundadora conmigo en la revista y me enseñó su dedo y su dedo, créanme, tenía un canal aquí, tenía un canal. Me decía esto es de tantas horas escribiendo. De tanto, ya el callo ya se había sumido y lo que tú veías aquí era una curva que era el lugar de lápiz. Y él escribió no sé cuántos libros y dio clases y corrigió. Fue maestro emérito en la UNAM y entonces él escribía, y cuando ya empezaron las computadoras, que él ya era más mayor, tenía una persona que los transcribía y todo esto, pero fue escribiendo, escribiendo sus investigaciones sobre México, sobre las culturas. La visión de los vencidos es un libro maravilloso. Y era esta curvatura de aquí. Y dices este señor está entregando su vida por un país que merece su tiempo y su vida. Pues cómo no agradecerle a este señor. Inclusive hicimos un libro sobre él cuando falleció, con textos y expresiones de 30 y tantas personas que lo habían seguido y han conocido su trabajo. Estas, por ejemplo, ahora de pronto son de las que te puedo decir que son memorables porque los personajes, y me gustan los paisajes y me gusta cuando fuimos a Tajín y me gusta eso, pero por encima de los templos y por encima de los lugares maravillosos que valen la pena, está la gente y esa gente, deberíamos saber un poco más de ellos y a veces se nos olvida. Gracias.

28:47
Santiago. Hola, qué tal. Mi nombre es Santiago Flores. Es un gusto conocerlo. Y también quiero agradecerle sobre todo a su aporte a la cultura mexicana, sobre pues visualizar lo bueno de lo malo, pero dentro de todo lo bueno, dentro de toda la tradición y la cultura, pues también está la naturaleza. ¿Qué nos puede platicar sobre la biodiversidad dentro del país?

29:13
Luis Jorge Arnau. Voy a hacer un comercial a favor de estas cápsulas que hace BBVA. Asómense a la presentación que hizo hace algunas semanas Carlos Galindo, que ha escrito varios libros con nosotros y escribe desde que empezó una sección que se llama Mexicanos por naturaleza y que es realmente un extraordinario divulgador. Pero más allá de eso, México, y esto se lo aprendí a él, México es uno de los cinco países megadiversos que tiene de todo, tiene de todo y somos mayoritarios en cactus, en reptiles, en una cantidad enorme y no nos asomamos a ver. Y Carlos platicó ese día aquí de que es increíble que una tercera parte, o no me acuerdo que porcentaje de aves del país, están en la Ciudad de México. O sea, a las aves les pasó lo que a los mexicanos, todos nos fuimos a la ciudad, aquí también, migración para acá y ese es un patrimonio enorme. Tenemos muchísima investigación de gente que ha hecho cosas maravillosas por recuperar y por mantener nuestro equilibrio ecológico. Yo digo que son de las instituciones que más van contrareloj, porque se tienen que pelear con el gobierno y se tienen que pelear con la iniciativa privada y se tienen que pelear a veces contra los mismos pueblos que no reconocen la problemática de talar una zona, etcétera. México tiene una biodiversidad enorme. Ese artículo que salía en cada revista dio origen a un libro que se llama Mexicanos por naturaleza, que también ha sido un libro muy bien recibido, porque lo que habla es démonos una idea a ver desde las ballenas hasta las ranas, porque aquí hay ballenas y ranas. Y por supuesto, hay algunos que son muy taquilleros, como la mariposa monarca y ahorita un poquito el ajolote, que afortunadamente, aunque es feo, ha venido teniendo como su realce. Pero hay muchos otros, hay muchos animales y muchas plantas que son propias. Le ponemos poca atención a las dalias y la dalia es la flor nacional, es la flor de México y hay una cantidad enorme de variedades. Y le ponemos poca atención a animales que no son tan glamorosos. Todos queremos ser amigos del panda, pues sí, nada más que el panda está muy lejos. Y entonces podemos hacernos amigos del teporingo, este pequeño conejito que está en las montañas del Ajusco. O podemos asomarnos a ver la migración de las tortugas. Creo que son seis y a lo mejor me equivoco, pero bueno, de las siete u ocho razas, o grupos de tortugas que hay en el mundo, seis llegan a desovar a México y las llegadas tanto al Golfo como al Pacífico son impresionantes. Y ahora afortunadamente hay colectividades que las cuidan. Y entonces ahora, en agosto septiembre, puede uno ir a las costas de Oaxaca y entonces puede ir uno a ver llegar cientos de tortugas, cientos de tortugas a desovar y dicen esto es una maravilla y no llegan a México por las malas noticias. Tampoco llegan por las buenas, llegan porque quieren llegar, porque son esos otros mexicanos que nos dio la naturaleza.

32:17
Luis Jorge Arnau. Y hay, en cada número, hay uno o a veces dos artículos que hablan sobre eso, sobre la enorme biodiversidad. Asómense, pero asómense no con ganas de matar a la araña o la hormiga. Asómense a descubrirlos. Hay una página que les recomiendo que se llama Naturalista, donde ustedes se pueden hacer investigadores ciudadanos y con su celular fotografiar animales y subirlos a la red. Y eso nos ayuda a descubrir que hay gorriones en México y que han llegado animales de otros lados. Les mencionaba hace rato que hay 364 lenguas en México y cuando hablo de lenguas no quiere decir como palabritas. Hay una estructura de una manera de pensar, algunas desafortunadamente en vías de absoluta desaparición, porque quedan 20, 30 ciudadanos que la usan. Hay otras que no. Es impresionante que el 6% o 7% de nuestra población habla una lengua indígena. Y si hablamos de 130 millones, quiere decir que más o menos 10 millones de personas siguen usándolo como su medio de comunicación. Entonces esos son mexicanos a los que hay que darles espacio. Hicimos un libro de apoyo a una comunidad que yo no conocía, en Oaxaca, que se llaman los ngigua y entonces vinieron con nosotros, hicimos un pequeño librito, que se llamaba Relatos e historias de los ngigua, y que es un librito que habla de sus leyendas y de sus leyendas que tienen que ver con la naturaleza y con el poder sobrenatural que se le daba a ciertos animales, al azahar, a las plantas, a los árboles. Y estas cosas hay que conservarlas y hay que conservarlas, porque mucha de nuestra medicina actual sigue dependiendo de eso. Todavía seguimos teniendo, aún en las ciudades, la abuelita y la tía que sabe que un té de hierbas de no sé qué, cura y ella no sabe ni por qué, pero históricamente se lo han enseñado y cura. Algunas cosas no tanto, pero hay de todo. Pero nos ayuda un poco a reconocer lo que se ha aportado y lo que hay de esas colectividades. Y hay mucho. El grave problema que tiene esta ciudad fue que, la Ciudad de México, lo digo por los que nos ven fuera de la Ciudad de México, es que a la llegada de los españoles, por la guerra, se destruyeron los diques que separaban los dos grandes lagos de esta ciudad, porque había un lago de agua salada, extrañamente salado o salobre, y agua limpia, por así decirlo. Agua dulce. Cómo había esta inteligencia, esta capacidad para poderlo dividir. Cómo la manera de ver las tradiciones y las costumbres, trae una historia que podemos compartir y que podemos darnos cuenta de las maravillas que tiene, cuando alguien te habla de ciertas ranas que hay en Tabasco y cuando te enteras que la enorme cantidad de cactus que hay, pero estas cosas de la naturaleza hay enormes aportaciones que todavía nos falta por aprender.

35:27
Luis Jorge Arnau. Hay mucha gente que ya hacen las típicas… seguramente ustedes tienen una tía, un tío que los cura a base de un ungüento milagroso que quién sabe de dónde lo saca, quién sabe de dónde sale, pero cura. Eso si le pusiéramos un poco de más orden, podría ser una enorme riqueza. Y eso es por dar solamente un ejemplo. Gracias.

36:44
Mar. Hola Luis, mi nombre es Mar y yo quiero saber o qué nos podrías contar de otros estados de la República que también tienen muchísima cultura y tradición.

36:53
Luis Jorge Arnau. Algo que hemos comprobado en Mexicanísimo, es que todavía sigue siendo una cultura muy centralizada. Este país tiene una chilango-dependencia que no es buena, no es buena porque minimizamos las aportaciones que se hacen en otros estados y que hay cosas excepcionales. Hace un rato platicábamos de las enormes aportaciones que hay en el cine y en la tecnología ahorita en Jalisco y en el cine de animación y lo que hay en otros lugares. Y uno va a ciudades que le parecen impresionantes, porque seguíamos pensando que este famoso dicho de que fuera de México todo es Teziutlán, no, no es cierto, o Teziutlán ha crecido demasiado y no nos hemos dado cuenta. Hay enormes cosas en San Luis Potosí, la fiesta del Xantolo, que es parecida a la fiesta de muertos, es una fiesta que tiene una tradición enorme. O, vamos, para los antojadizos, vayan también a esa zona de la Huasteca a comerse un zacahuil. Un zacahuil es un tamal que llega a medir un metro. O sea, hacen una cosa así, porque es una preparación comunitaria y es para compartir y este tipo de cosas que todos los estados tienen y que tienen su riqueza y que tienen sus aportaciones. Y no voy solamente a la parte antigua, como les mencionaba, es impresionante el avance de ciudades que de pronto se nos hace como que no, el tamaño de León, Guanajuato o las aportaciones que hay en Puebla o las zonas industriales, que dices pues es que este es un país multicultural y que tiene riqueza desde Tijuana hasta Chetumal, pero que a veces sobre todo insisto, esta chilango-centrismo, no nos permite ver. Tampoco se trata de ahora generar una corriente de fuera en contra de los de aquí, pero tenemos que ver que el país recibe hoy enormes aportaciones que hay en todo el país y nosotros lo que hemos hecho es cuidar eso. Por ejemplo, hicimos un libro de fotografía sobre Querétaro. Lo que tratamos fue que principalmente los fotógrafos fueran queretanos, no por eliminar a los demás, sino porque hay que dar espacios a que la gente pueda hablar de lo que tiene, de lo que ha aportado. Hay muchos héroes que se han hecho locales y que deberíamos hacerlos nacionales. Epigmenio González, también de Querétaro, que fue uno de los promotores de la independencia, pero como lo mandaron a la cárcel y todo, pues se oye poco. Hay héroes muy locales que podríamos asomarnos a verlos, y ver por qué en Puebla son partidarios de tal o cual gente. Esta riqueza, cuando hablamos de multiétnica y multicultural, también se da ahí, también se da ahí. Tenemos que asomarnos, asomarnos de afuera hacia adentro y de adentro hacia afuera. Y tenemos que ir a ver qué pasa en las costas. Los esfuerzos que están haciendo ahora los pescadores para mantener limpia sus playas en la zona de Vallarta, Nayarit, todo esto que están tratando de hacer promoción para que el pescador cuando sale a pescar recoja basura que hay en el mar, y todas estas cosas que pues a lo mejor los que estamos aquí preocupados porque no ha pasado el camión se nos olvida darnos una asomadita. Mexicanísimo y no solo Mexicanísimo, la editorial lo que trata es de hacer es mostremos a gente que está fuera haciendo cosas excepcionales y voy a incluir a un estado adicional que es el estado de la franja fronteriza. Mucho el trabajo que se hizo, sobre todo en la frontera norte, también en el sur con Vasco de Quiroga y todo esto, pero sobre todo en el norte, fueron todo este trabajo que hicieron los misioneros para llegar a zonas absolutamente desérticas, con comunidades mínimas, sin ningún tipo de recurso o contacto con la zona central, digamos, ya no digamos con la capital, con la zona central.

40:36
Luis Jorge Arnau. Y todos ustedes han oído hablar del padre Kino, pero por otras razones, porque todos nos acordamos del vino. Pero el padre Kino fue un misionero italiano que llegó a México y decidió que iba a ir a trabajar en lo que llaman la Pimería, que es toda esta zona en el noroeste, que es Sonora, Baja California, parte de Chihuahua. Y allá fue, donde había otras personas, había otros misioneros y él fue de los primeros cartógrafos, además de ser sacerdote y de ser explorador, que mostró o pudo comprobar que Baja California no era una isla como se pensaba, sino era una península e hizo enormes trabajos con la comunidad. Y fíjense una anécdota que hay del padre Kino, había un problema de tierras entre las tribus que estaban ahí y el único que lo podía resolver era el virrey en la Ciudad de México, el padre Kino vino a la Ciudad de México. Imagínense 2 mil y tantos kilómetros a caballo. No les digo cómo llegó, pero imagínense lo que es venir tantos días, semanas, para llegar a la Ciudad de México, para ver al virrey y platicarle el problema que le resolviera, y el virrey no lo recibió. Y ahí va de regreso. Este tipo de malos tratos y de desatenciones y de, lo importante es lo que sucede aquí. Son de estas historias que dices no puede ser, o sea, no puede ser lo que pasó con esta gente. Pues que olvidados allá arriba y que pues simplemente no les dimos su espacio y no estamos muy lejos porque el padre Kino, a lo mejor fue siglo XVII o XVIII. Pero hoy nos pasa con los jesuitas que están trabajando en la Sierra Tarahumara y están casi en la incomunicación. Y estamos hablando de siglo XXI. Y hay gente que está trabajando con comunidades rarámuris que parece que están en el siglo XVII, porque los hemos olvidado. Y no se trata de que les demos, se trata de que les permitamos crecer. Hay que sustituir este esquema de, yo que soy el bueno, te doy a ti que estás pobrecito. A, yo te voy a ayudar porque yo creo que tú puedes salir y esta parte de fortalecer y enriquecer con su propia realidad es algo que nos hace falta mucho. Y de estas historias han salido muchas. Gracias.

44:06
Jaquelin. Hola Luis, mucho gusto. Soy Jaquelin Jiménez Herrera. Yo creo que la historia la transformamos tanto hombres como mujeres y muchas veces a nosotras como mujeres se nos oculta. No sé si nos podrías platicar un poquito más de mujeres que han cambiado el rumbo de México con sus aportaciones.

44:22
Luis Jorge Arnau. Cuando hicimos el libro de los 200 mexicanos, del personaje del año, los primeros 100 años, de 1810 a 1910, hay cuatro mujeres, en 100 años. En los últimos 25 años, la mitad son mujeres, o sea, la mitad del personaje más importante de cada año. Y esa riqueza la teníamos menospreciada. Yo no digo que olvidada, porque la función educativa era muy importante y sigue siendo muy importante, pero la teníamos menospreciada. El último libro que estamos haciendo, por hablar un poco también del tema femenino, que se llama Cómo nos vemos, que habla sobre 100 autorretratos de mujeres mexicanas, de pintoras mexicanas, se debe a que en el Bicentenario se hizo un libro, entonces Conaculta, que decía voy a hacer, hicieron un libro de 100 autorretratos y de 100 autorretratos solamente había creo que nueve mujeres. La carga estaba abrumadoramente hacia un lado y entonces nosotros dijimos, a ver espérame vamos a ser justos, vamos a dar los espacios. Entonces estamos haciendo este libro donde están conviviendo, que también es cierto, porque cuando hablamos de pintoras, pues no solamente hay que referirnos a Frida y a Dolores, a todos ellos que son pues los que conocemos, no hay que acercarnos a las pintoras actuales y entonces estamos balanceando 50 grandes nombres de pintoras mexicanas, las más reconocidas, donde está Izquierdo y todas estas y 50 pintoras emergentes, porque hay una verdad que se está diciendo y que además nos ayuda a ver cómo se ven a sí mismas. Porque el autorretrato es eso, desde los primeros autorretratos que hay del siglo XVIII, hasta las que pintan en los puentes, en las calles, que tienen su propia interpretación de lo que son y te das cuenta de la visión y la mirada de la gente sobre ellos mismos. Entonces lo que decidimos es, queremos aplaudir, queremos aplaudir a los científicos. Hoy hay una enorme cantidad de científicas mexicanas que están en el mundo, no solamente en México, haciendo aportaciones enormes, enormes, Muchas veces históricamente estuvieron escondidas porque el logro de ella, se lo agenciaba él y entonces de pronto el líder de la investigación en la universidad, que era hombre, tenía seis mujeres trabajando y lo que ellas descubrían, lo firmaba él. Esto es algo que pasa en todo el mundo, desafortunadamente, pero en México pasaba mucho. Hay una científica que se llama Silvia Torres Castilleja, que es primera científica que recibió un máster en Astronomía y que es hoy una de las científicas más reconocidas a nivel internacional. Le acaba de dar la ONU un reconocimiento de mujeres que aportan y te estoy hablando de ella, no porque sea la única, sino por dar un ejemplo del enorme abanico que hay y ya no solo hablemos en la ciencia. Hay mujeres aguerridas que han cambiado el siglo XX. El siglo XX fue, el siglo de las mujeres, que empieza desde cuando estaban con las primeras luchas para ganar el voto, hasta las mujeres que tomaron las calles y que ahora continúan con los movimientos feministas pero que han participado, esto no es nuevo, y lo digo para que la gente no diga es que acaban de empezar las mujeres, no es cierto.

47:51
Luis Jorge Arnau. Las mujeres tienen desde esta mujer, Elvia Carrillo Puerto en Yucatán en 1900, que estaba luchando a favor de los derechos de la mujer y podemos pasar con Tina Modotti y podemos pasar con muchas mujeres. Frida, que era muy, y todas estas que cambiaron en un momento, en el que además tuvieron el mayor cambio posible, que fue decirle al hombre, este es mi lugar. O sea, independientemente de las otras aportaciones, puedo decir a ver, quieto maestro, este es mi lugar y tengo mis derechos. Y hoy, bueno, tenemos una presidenta, pero tenemos la mitad del Congreso, son mujeres y hay una enorme cantidad de mujeres participando. Creo que nos falta un poco más en la empresa. En la empresa todas siguen siendo menos del 10% las mujeres que están en posiciones de liderazgo. Pero para allá van, no hay mucha prisa o a lo mejor no les interesa y nos están dejando las obras y eso es con lo que nos vamos a contentar. Pero yo creo que hay una enorme cantidad de mujeres así. Desde el tiempo de Sor Juana y del tiempo de, hablábamos hace un rato de Isabel Moctezuma y hablábamos de estas mujeres aguerridas con Leona Vicario o la gente que ha hecho cambios fuertes. La madre Chepa tiene una historia muy particular. En realidad se llamaba Josefa, pues Chepa porque así lo igualamos. Era una mujer española que vino a México y que fue la primera, que se sepa, hay tantos huecos en la historia y hay tantos huecos todavía mayores en la historia de la mujer, que luego decimos es la primera y a lo mejor es la 15ª, porque otras 14 nadie las peló. El las peló, es muy mexicano, perdón. Fue la primera partera oficial reconocida que empezó a aplicar las técnicas españolas para atender a las madres parturientas, pero empezó a aprender cosas de los grupos sociales de aquí, a tal grado que la empezaron a acusar de brujería, porque empezó a usar todas estas cosas que se han usado por siglos para ayudar a la mujer a dar a luz. Y entonces los que venían de Europa decían esta es brujería porque está usando hierbas. En realidad no es que fuera bruja, es que pues estaba aprovechando lo que le habían dicho las parteras tradicionales, porque el parto no vino de Europa. El punto fuerte para nosotros es que se aprovechó este conocimiento y ella, que es reconocida como la primera partera, porque los maridos no las dejaban atenderse por los hombres. No sé si sepan mucho esta historia donde las mujeres tuvieron un campo abierto para entrar en la parte médica, entre otras cosas porque los hombres no permitían que sus mujeres fueran con un médico que las tocara. Y entonces pues había un espacio natural que permitió, que empezó por el lado de los partos, pero después creció a muchas otras zonas.

51:08
Luis Jorge Arnau. Y la madre Chepa pues que fue siglo XVI, creo, puedo equivocarme, fue la primera de la que se tiene un registro de su labor, porque además porque la Inquisición la acusó y tuvo que ir a defenderse de que lo que estaba haciendo no era brujería, sino aportar unas hierbas que había en Tabasco y que la hierba servía para relajar. Pues es que no había penicilina, o sea, entonces usábamos lo que teníamos y hay mucho de eso. Ella es un ejemplo de estas mujeres que fueron abriendo camino y que afortunadamente nosotros en Mexicanísimo hemos hecho mucho este esfuerzo de visibilizar y de nuestros contenidos tienen que buscar que haya espacio para ambos y ahora ya no es para ambos, es para los distintos géneros. Y porque te das cuenta de que el mundo ha cambiado, el mundo no puede seguir siendo unilateral. Gracias.

52:41
Mara Itzel. Qué tal, Luis. Mi nombre es Mara Itzel, mucho gusto. Me parece maravilloso que nos platiques de aquellas personas que nos aportan grandes cosas y que hacen las cosas bien, como dices tú. Me gustaría que nos compartas quiénes son las y los mexicanos más destacables en la ciencia y tecnología en los últimos años.

53:02
Luis Jorge Arnau. Voy a recordar algunos de los que puedo darte con cierta certeza, como Juan Enríquez, que se ha dedicado a hablar de hacia dónde vamos y cuál es el futuro. Hablamos hace un ratito de Arturo Álvarez-Buylla, que es un científico que está trabajando con el cerebro humano y es investigador en ciencias neurobiológicas y que acaba de recibir el premio, bueno, no acaba, hace unos tres o cuatro años, recibió el premio Príncipe de Asturias, que es uno de los premios más importantes que hay en habla hispana. Y hay más. Hay muchos científicos que están repartidos en el mundo, que se los han llevado a veces por falta de oportunidades aquí, eso es cierto y a veces porque la ciencia no tiene fronteras. A ver, cuidemos que la frontera no es más que un accidente. Entonces, si yo encuentro mi desarrollo jugando fútbol en Turquía, me voy a ir a jugar fútbol a Turquía, porque lo que quiero es mi satisfacción. Si yo creo que el mejor lugar para investigar sobre neurobiología es en San Francisco, me voy a ir a San Francisco. Eso no se puede evitar en ningún lado. Lo que sí deberíamos hacer es fomentar el que hubiera oportunidad para que esa gente pudiera hacerlo en México. En la ciencia el problema es que no hay demasiados, no hay demasiados lugares. Nuestro famoso premio Nobel Mario Molina, sus investigaciones no fueron hechas en México. Tenemos científicos de los que se habla poco. Hace unos años hubo un premio Nobel que se le dio a una organización que se dedicaba a hablar del cambio climático y esta organización tiene 270 científicos, de los cuales 19 son mexicanos, y de esos 19 creo que 14 son de la UNAM. Hay mexicanos ahorita trabajando en el famoso colisionador, que es lo más avanzado de la ciencia que está en Suiza y que ahí hay mexicanos trabajando, hay mexicanos trabajando en la NASA, hay mexicanos trabajando en casi cualquier lado y es gente que no se puso el huipil y dijo de aquí soy y no me muevo. No, pues dijo dónde está, aquí voy, quiero hacerlo, quiero ser la mejor o el mejor, a dónde hay que ir, pues hay que ir. El problema es que los de aquí luego se nos ocurre, no se nos ocurre celebrar aquellos que fueron, como tampoco se nos ocurre celebrar a los que vinieron. Somos poco agradecidos con mucha gente que llegó a México y que han hecho muchas cosas. Gracias.

55:48
Valeria. Hola, me llamo Valeria y mi pregunta es: si pudieras crear una buena tertulia histórica, ¿con quién sería y por qué?

55:56
Luis Jorge Arnau. Uy, ahorita me acuerdo que hice un libro que se llama 100 tertulias, que lo que busca con ese libro es abrir o sugerir temas para una tertulia, para sentarte a platicar con los cuates, con las cuatas, para que el café tenga más valor, para pasarla a gusto. Y en estas 100 tertulias, es decir, bueno, no todo es política, religión o fútbol, hay más cosas. Hablemos de otras cosas y hablemos. ¿Quién me gustaría? Me gustaría Sor Juana, olvídense de la parte de los poemas de Sor Juana, esa es menor, Sor Juana era un personajazo. Tenía influencia con la esposa del Virrey, tenía un grupo de amigas, era bien política. Sor Juana debe ser otra, así como otra por hablar de mujeres excepcionales. A mi gusto, la mujer más interesante del siglo XX, es Tina Modotti. Estuvo involucrada con todos los políticos. Y no me refiero únicamente a carnalmente, no. Estuvo metida en grillas políticas, culturales, con todos los pintores, con todos los escultores. Estuvo muy involucrada en todo. También, perdón, Nahui Olin. Nahui Olin que también tuvo una vida impresionante, o sea, de estas, en cuanto a mujeres, yo te diría que esas tres. Vasco de Quiroga, que Michoacán, fíjense, lo importante que hizo, 500 años después Michoacán le sigue debiendo a Vasco de Quiroga, que es el estado con más artesanías distintas. Todo eso fue por Vasco de Quiroga, que dijo a este pueblo le voy a enseñar a hacer guitarras, a este pueblo voy a enseñar cerería, a este pueblo. Y ahí está Michoacán que es una maravilla. Y Vasco de Quiroga hizo todo eso, sentarte a entender. Yo sería con los que platicaría, con intenciones de tertulia, porque luego hay otros que podrías platicar con otras intenciones. Gracias. Voy a hacer un comentario que suena a campaña política, pero no estoy buscando hueso. Creámonosla. Creamos en el potencial que tiene este país y que se lo queremos transmitir a los hijos. Creamos en las posibilidades. Cuando la gente empieza a creer, empieza a crear, no antes. Hay que darnos la oportunidad de sentirnos mexicanos, no solamente el 15 de septiembre. Hay que vivir la realidad y hay que cambiarla. La única manera de cambiar este país es con 120 millones de esfuerzos. Lo que hay que hacer es asumir el reto, porque es un reto, porque las cosas no están fáciles, de que se puede cambiar, de que se pueden hacer pequeños milagros, pequeños milagros urbanos, diarios, pequeños, pequeños pintados para que la pared no se vea tan mal. El país sí nos merece y nosotros nos merecemos al país. Nos toca pensar que en un camino de tolerancia, de tolerancia a mis vecinos, a los de otras ciudades, a los de otras costumbres, otros rezos, con tolerancia, se puede hacer un plan nacional de reconciliación, una palabra de la que no se habla mucho, porque reconciliar implica que yo tengo que ceder.

59:18
Luis Jorge Arnau. No hay manera de que reconciliemos solamente con que tú tengas que ceder. Creo que si aprendemos a esto, vamos a poder transmitir mucho más de las buenas noticias que tiene este país. Muchas gracias y gracias por escucharme.