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“No es verdad que no haya esperanza para salvar el planeta”

Rodrigo Medellín

“No es verdad que no haya esperanza para salvar el planeta”

Rodrigo Medellín

Biólogo


Creando oportunidades

Rodrigo Medellín

Rodrigo Medellín es un biólogo conocido como el "Batman de México", apodo otorgado por Sir David Attenborough como un reconocimiento a su dedicación a los murciélagos. Obsesionado con el estudio y la conservación de la fauna, desde niño mostró un interés inusual por los mamíferos, lo que lo llevó a participar en un programa de televisión a los 11 años, donde impresionó con su conocimiento. Este evento marcó el inicio de su carrera, siendo invitado al Instituto de Biología de la UNAM, donde al cabo de unos años estudió su carrera como biólogo para continuar su formación en Estados Unidos, consolidando así su sueño de trabajar con murciélagos y logrando hacer de su pasión su profesión.

En la actualidad, lleva más de 40 años dedicando su vida a investigar a los murciélagos y a enseñarnos cómo uno de los mamíferos más temidos y odiados en todo el mundo son en realidad tan beneficiosos para nuestra sociedad. Medellín ha trabajado incansablemente para cambiar la percepción negativa de los murciélagos, destacando su importancia en el control de plagas, la dispersión de semillas y la polinización, vital para la producción de tequila y de mezcal. Además, ha colaborado con comunidades indígenas, como la comunidad konkaak, con el fin de implementar prácticas de conservación que beneficien tanto a la biodiversidad como a las economías locales. Su incansable labor ha impactado políticas públicas y ha sido fundamental en la recuperación de especies y ecosistemas. Rodrigo Medellín continúa siendo un ferviente defensor de la naturaleza, inspirando a nuevas generaciones a valorar y proteger el mundo natural.


Transcripción

00:09
Rodrigo Medellín. Estoy contentísimo de estar con todos ustedes, con todas ustedes. Y de una vez les voy a decir algo. Van a salir cambiados. El día de hoy los vamos a convertir en defensores de los murciélagos. Resulta que yo soy… A mí me llaman el Batman de México. ¿Cómo surgió esto? Aquellas, aquellos a los que les gusten los documentales de animales, los documentales de naturaleza, hay un hombre muy, muy mayor, tiene 98 años ahorita, que narra los mejores documentales que hayan visto. Es un hombre británico que se llama Sir David Attenborough.

 

Él es el que me puso este apodo. Entonces, imagínense la impresión de que si Sir David Attenborough, un hombre que yo he admirado toda mi vida, dice que yo soy el Batman de México, yo soy el Batman de México. Si él dice que yo soy la abuelita de Batman, yo soy la abuelita de Batman. No me importa. Cuando llegué a tener 11 años en la televisión mexicana de esos años, mucho tiempo antes de que todos los que están aquí hubieran nacido, había un programa de televisión que se llamaba «El Gran Premio de los 64,000 Pesos».

 

Es un programa en el que tú escoges un tema y tú vas contestando preguntas sobre ese tema y te van doblando la cantidad de pesos que ganas hasta los 64,000. Yo le dije a mi mamá, yo quiero estar ahí. Yo era un escuincle de 11. Mi madre me lleva con los productores del programa. Y los productores le dicen a mi mamá, no, señora, es que este no es un programa como el de Chabelo, donde el niño va a dar una pelota, le avienta algo y se lleva un premio.

 

Este es un programa donde la gente muestra conocimiento de verdad y va a lucir ese conocimiento. Pues mi hijo quiere concursar con el tema de mamíferos. Y yo lo que quisiera pedirles es que le den la oportunidad. Saquen un libro y empiecen a preguntar. A ver si sabe o no. Sacaron el libro, me empezaron a preguntar y yo empecé a contestar y contestar y contestar. Y al rato, pues dicen, pues felicidades porque vas a ser el primer niño en el programa. Y fue el primer niño que apareció. En esos años, por supuesto, en México, estamos hablando en 1970 por ahí, hay tres canales de televisión. Nada más, el dos, el cuatro y el cinco, se acabó. Eso quiere decir que toda la población está viendo lo mismo. Incluido el fundador del estudio de los mamíferos de México, el doctor Bernardo Villa de la UNAM, del Instituto de Biología de la UNAM, que me ve y dice, yo a este niño lo quiero en el laboratorio. Yo quiero que venga al instituto, llama a la televisora, pide el teléfono en mi casa, llama a mi casa y me dijo, si tú quieres seguir aprendiendo de los mamíferos que tanto te gustas, vente, vente al Instituto de Biología, yo te invito. Y te vamos a estar llevando al campo.

 

Felicidad, ¿no? Me dediqué a ser biólogo, estudié biología en la UNAM, luego me fui a un posgrado en los Estados Unidos. Y pues logré continuar con este sueño. Esa foto me representa cuando yo tenía 13 años y es uno de los primeros murciélagos que yo tuve en mi mano. Tengo que hacer una aclaración aquí. Nunca jamás sostengan un murciélago de las alas así. Es una posición muy estresante para los murciélagos. El tema aquí es que esa misma pasión que ustedes ven allí, yo la sigo sintiendo. Ayer, sin ir más lejos, estábamos en el Jardín Botánico de la UNAM capturando murciélagos con mis alumnos. Y estaba yo igual, igual.Y así voy a seguir hasta que me muera. Porque yo me considero a mí mismo un niño eterno. Sigo siendo el mismo niño. Eso que sintió ese niño a los 13 años de tener sus murciélagos en la mano, yo lo siento hoy. Con la diferencia, claro, de que yo no tengo ya murciélagos vivos en mi casa Ya mi esposa no me deja, ¿verdad? Pero efectivamente, el tener esa maravilla en las manos, y ojalá y todas y todos ustedes tengan la posibilidad de ver un murciélago así de cerquita para que le pierdan el miedo, para que le pierdan esa imagen negativa que es completamente falsa y que son animales verdaderamente fascinantes. Y les garantizo que cuando lo vean, les van a salir una inmensa cantidad de preguntas que es lo que me mantiene joven, es lo que me mantiene vivo, es lo que me mantiene apasionado al respecto de estos animales.Gracias.

05:58
Andrea. Hola, mi nombre es Andrea.¿Podrías compartir con nosotros un minuto de murciélagos para principiantes?

6:03
Rodrigo Medellín. Claro que sí, con mucho gusto, Andrea. Los murciélagos son mamíferos igual que nosotros y los perritos y los gatitos, es lo mismo. Pero hay más especies de murciélagos que casi cualquier otro grupo de mamíferos. Tenemos más de 1,400 especies de murciélagos en todo el mundo. México tiene 145. Tenemos el 10%. Somos el sexto país con más murciélagos en el mundo. Los murciélagos tienen unas dietas súper variadas. Hay murciélagos, tres de cada cuatro murciélagos comen insectos.

 

Luego hay unos que comen fruta, otros que comen néctar y ponen de las flores, otros que comen peces, otros que comen pajaritos, ratones y otros murciélagos, son carnívoros. Y hay tres de esas más de 1,400 que comen sangre, sangre de mamíferos grandes y de aves grandes. Bueno, los murciélagos tienen una historia muy larga de evolución. Los más viejos que conocemos ahorita tienen 52 millones de años y ya son murciélagos perfectamente formados, si les ven las alas y todo. Pero los murciélagos de hoy tenemos bien claro que es la máxima diversidad que ha habido de murciélagos en el mundo. Y eso quiere decir que no te puedo decir cuánto vive un murciélago. La típica respuesta del biólogo depende de la especie. ¿Cuánto dura la gestación de un murciélago? Depende de la especie. Pero para darles una idea, hoy ya hemos medido cuánto viven algunas especies de murciélagos. El que menos vive, vive cuatro años. Y el que más vive, sigue vivo y tiene 43 años. Y es un animalito del tamaño de mi pulgar que vive en Alemania. Bueno, con respecto a la gestación, hay murciélagos que tienen gestaciones de dos o tres meses y hay murciélagos que tienen gestaciones de 10 meses, dependiendo de la especie, porque hay unos, ese que tenía yo en las manos ahí cuando salgo de niño, que se aparean, empieza el desarrollo del embrión, pero luego llega la época de secas, se acaba el alimento. Y entonces la hembra le pone un freno al desarrollo del bebé. Imagínate, qué cómodo, ¿no? «Ay, espérate, ahorita no quiero que sigas creciendo. Espérate, niño, no vas a crecer».

 

Y así se queda congelado el embrión durante cuatro a cinco meses, hasta que vuelve a llover.

Vuelve a llover, vuelve a haber comida, y entonces la hembra le dice «Ahora sí, síguele y ya vas

para afuera». Entonces acaba siendo una gestación de 10 meses.

 

Los murciélagos no son ratones, no tienen nada que ver con los ratones. Hay veces que la gente dice «Ay, son ratones con alas». Nada que ver. Los ratones viven un año, máximo dos. Los ratones tienen partos de seis, de siete crías cada parto, y cada hembra ratona puede tener seis, ocho partos en un año. Los murciélagos tienen un solo bebé, la gran mayoría de los casos, un solo bebé por parto, y cada hembra solamente puede tener un parto al año. Por eso se tardan tanto en recuperarse cuando golpeamos, destrozamos, destruimos una colonia de murciélagos, se tardan mucho en recuperarse, porque son muy lentos para reproducirse, a diferencia de los ratones. Lo que están viendo ahí es el llamado zorro volador, y es muy claro por qué tiene ese nombre común, porque tiene una carita como un zorrito igual. Es el murciélago más grande del mundo. Vive nada más en el sureste asiático y en Australia.Es un animal 100% frugívoro, come fruta, nada más. No come sangre, no come insectos, no come más que fruta. Por el tamaño, ustedes imaginarán que una colonia de estos animales es una cosa enorme, muy ruidosa y muy olorosa.A los australianos de repente dicen, «Hijo maestro, qué bonitos tus murciélagos, pero ya llévatelos, por favor». Entonces, si me pueden mostrar el que sigue, ahí ustedes van a ver a este zorro volador, para que vean las dimensiones del animal. Es verdaderamente enorme, yo ahí lo tengo colgado de mi mano, y ahorita va a batir sus alas y se van a dar cuenta, vean nomás el tamaño. Y además yo con el brazo así y un peso de kilo y medio, se me iba así para abajo el brazo constantemente.

 

Son animales que están rodeados de mitos, están rodeados de supersticiones. Los murciélagos son enviados del mal. ¡Ay, el diablo! ¡Ay, las brujas! ¡Ay, los vampiros! ¿Sí o no? Bueno, resulta que la historia de los vampiros es bien interesante, porque el vocablo «vampiro» es una palabra del serbio de Europa Central, que se refiere a seres humanos muertos que reviven en la noche y que van a buscar gente para morderles y chuparles la sangre.

 

No tiene nada que ver con un murciélago, nada. Pues resulta que, vámonos a la historia, de las más de 1,400 especies de murciélagos que existen en el mundo, solamente tres comen sangre.

Las tres viven en el continente americano, las tres viven en México. De esas tres, dos son muy raras y viven en las selvas más recónditas. Y solamente una es la que nos causa los problemas, porque nosotros los convertimos en problemas. El murciélago vampiro común es un animal que vivía originalmente en bajas densidades, porque se alimentaba de la sangre de tapires, jabalíes, venaditos, conejitos, etcétera. Animales que viven en densidades bajas. Pero luego, cuando llegan los europeos a este continente, pues traen el ganado, los caballos, los cerdos, las cabras, las ovejas, y eso es ponerle la mesa a un animal tan oportunista como éste. Entonces, si nos vamos al origen, resulta que cuando llega Hernán Cortés a este continente, viene con sus escribanos, que están escribiendo todo lo que están viendo. Bernal Díez del Castillo es uno, otro es Gonzalo Fernández de Oviedo, un hombre muy observador, muy meticuloso, muy cuidadoso, muy curioso, que escribe en sus crónicas que cuando bajaron los caballos de las carabelas de Cortés y los soldados, en la noche aparecían unos animalitos que volaban y que se posaban sobre los caballos o sobre los soldados y que los mordían para alimentarse de su sangre. Nunca usa la palabra murciélago, pero eran nocturnos, voladores, y mordían, pues son los murciélagos, hematófagos o vampiros.

 

Y eso lo refleja en sus crónicas. Déjenlo allí, 1519, por allí. Luego, le damos para adelante 360 años, en 1860 más o menos, está Bram Stoker escribiendo una novela maravillosa allá en Irlanda, «Drácula». Y Bram Stoker, y esto ya es un poco imaginación mía,es un apasionado de la historia. Y él tiene el problema de que su vampiro, un ser humano, nada que ver con murciélagos, tiene que moverse grandes distancias para ir a morder a la muchacha. Se acuerda de las crónicas de Gonzalo Fernández de Oviedo y dice, ya sé, mi vampiro se va a convertir en murciélago, va a volar todo aquello y se vuelve a convertir en humano y va a morder a la muchacha. Muchas gracias, señor Stoker, porque ese es el momento en que la reputación de los murciélagos se viene para abajo, no se vale, ¿no? Bueno, y empiezan a aparecer las películas de vampiros. Ustedes se acuerdan de que en todas las películas de vampiros, a los vampiros los ponen con unos colmillotes enormes. Todo eso está mal. Hay una única película de vampiros que es anatómicamente correcta.»Nosferatu» de Murnau, de 1918, por allí, del expresionismo alemán. ¿Por qué digo que es anatómicamente correcta? Porque los vampiros no muerden con los colmillos, muerden con los dientes incisivos,los tienen filosísimos. A mí me han mordido y no te das cuenta de que te mordieron. Es una mordida muy rápida, que hacen «bum».

 

Y la mordida de un murciélago vampiro es del tamaño y de la forma de medio confeti. Agarren un confeti y pártanlo a la mitad, así se ve una mordida de un vampiro. Entonces, «Nosferatu», el vampiro de «Nosferatu», sale con los dientes así. ¿Qué miedo me va a dar un vampiro que venga?¿Te dudarías morder? Pues claro que no. Entonces, el resto de los directores de Hollywood, etc., decidieron ponerle los colmillos porque se ven más agresivos y lo que sea. Ese es el origen del mito de los vampiros.Olvídense, pobres murcielaguitos, dejémoslos en paz.

16:52
Ariadne. Hola, Rodrigo, yo soy Ariadne, es un placer estar aquí. Y yo quería preguntarte, ¿por qué murciélagos? ¿Qué tienen de especial y qué beneficios podemos sacar de estudiarlos?

17:02
Rodrigo Medellín. Los murciélagos, Ariadne, son los animales más injustamente maltratados de la creación. Hay muchos animales que tienen una imagen pública negativa. Los tiburones, los alacranes, las arañas, las serpientes, los murciélagos, nadie los quiere. Los ven y ahí písame esa araña tan fea. ¡Ay, qué horrible una serpiente! Todo el mundo es así. Ninguno de esos animales hace más por tu beneficio diario que los murciélagos.

 

Y vamos a enumerar tres, y solamente tres, pero son muchos más, tres beneficios que recibimos en nuestra vida diaria y que ustedes, sin sospecharlo, ya los recibieron hoy. El primero es el control de las plagas de la agricultura. Los murciélagos son los más importantes controladores de plagas de muchos cultivos. El maíz, el arroz, el frijol, el chile, el algodón y muchas otras cosas más las tenemos gracias a que los murciélagos están protegiendo nuestros cultivos. Nosotros hemos demostrado que en la ausencia de murciélagos perdemos entre el 20 y el 30% del maíz. Terminamos recientemente un estudio aquí en el estado de Morelos la infestación por la plaga en el arroz morelos, que todos hemos comido, se vuelve el doble sin los murciélagos. Entonces, si hoy ya se echaron su taquito en la mañana o se van a echar una paella ahora el fin de semana, ya están conectados con los murciélagos. Todas y todos aquí o beben té, o beben café, o beben chocolate. También los murciélagos están defendiendo esos cultivos de sus plagas. Todos aquellos que tengan alguna prenda de algodón, conectados con los murciélagos, porque los murciélagos protegen al algodón de la plaga. Primer beneficio.

 

Segundo beneficio. La dispersión de las semillas. Tenemos en los mercados mexicanos muchísimas frutas tropicales. El chico zapote, el zapote negro, el zapote blanco, la guayaba, la guanábana, los higos y muchos, son docenas y docenas más, que tenemos hoy gracias a que los murciélagos son los que han dispersado esas semillas en el medio natural durante millones de años. Hoy las tenemos gracias al trabajo que esos murciélagos han hecho durante muchos, muchos años. Pero además, los murciélagos son los directos responsables de la regeneración de las selvas. Los humanos nos estamos acabando los bosques tropicales en todo el mundo. Los primeros elementos que crecen cuando los humanos tumbamos la selva y empieza la regeneración son todas plantas que han dispersado los murciélagos y que esas semillas llegaron ahí porque los murciélagos las llevaron.

 

El tercer beneficio tiene mucho que ver con los mexicanos y es la polinización. Hay muchas plantas que son ecológica o económica o culturalmente importantes que dependen de los murciélagos para su polinización. Si alguno de ustedes ha estado en el trópico, en cualquier lugar han visto esos árboles majestuosos que los mayas consideran un árbol sagrado, la ceiba. La ceiba es polinizada por murciélagos. Aquellos que nos estén viendo desde cualquier lugar tropical, desde Cancún hasta Acapulco, desde Tampico hasta Culiacán, van a ver que hay grandes ceibas en los zócalos de esas ciudades. La temporada de floración de las ceibas es por allí de febrero, marzo. Y la gente está paseando abajo de las ceibas y «ahí va mi novia, ahí va mi novio y no sé qué». Si voltearan para arriba, verían la enorme cantidad de murciélagos que están visitando las flores. Y gracias a ellos tenemos las ceibas. Luego, los cactus columnares, esas enormes plantas del desierto sonorense, saguaros, cardones, pitallas, etc., dependen de los murciélagos para su polinización. En murciélagos, las películas de vaqueros con esos saguaros enormes, olvídense, no habría. Esta es la flor del saguaro. Es una flor hermosísima, grandota, muy profunda, que acomoda toda la cabeza y todo el cuerpo del animal hasta acá. Se mete el murciélago hasta el fondo y está lamiendo el néctar que está en el fondo.

Y cuando sale, pues claro, sale todo cubierto de polen. Un alumno mío estaba trabajando en el Zoológico de Chapultepec y un día me dice, «Oiga, aquí en la jaula de las hienas del Zoológico de Chapultepec hay un cacto columnar que tiene flores. Le voy a poner una trampa cámara».

 

«Ponle la trampa cámara, pero ya». Le pone la trampa cámara y el día siguiente, fotos y videos de murciélagos visitando las flores del cacto. Entonces hablé con el director del Zoológico y le digo, «Oye, maestro, ¿qué chances hay de que me encierres a las hienas en su jaulita chiquita para que nosotros podamos entrar a su encierro?». «No, ¿cuándo lo quieres hacer? ¿El viernes?». «El viernes». Encierro a una de las hienas y me meto con mis alumnos al encierro de las hienas a poner las redes allí y efectivamente caen murciélagos de estos. Y eso fueron noticias en Alemania, en España, en Inglaterra, en los Estados Unidos, porque había murciélagos nectarívoros en el Zoológico de Chapultepec. Eso detonó que hiciéramos un estudio precisamente con cómo los murciélagos nectarívoros de la Ciudad de México usan el paisaje de la ciudad.

 

Y encontramos movimientos de estos murciélagos que fueron marcados en el Zoológico de Aragón, junto al aeropuerto, y aparecieron en el Jardín Botánico de la UNAM, a 20 kilómetros al sur. ¿Por dónde se fue? La única respuesta que tengo es por la calzada de Tlalpan. Agarraron Tlalpan y por puro Tlalpan se fueron. Pero ahí aparecieron. Es una cosa impresionante que sean capaces de adaptarse a las condiciones de una ciudad tan contaminada, tan humana en el sentido de que estamos destruyendo el paisaje y ahí están los murciélagos tan tranquilos, tan campantes. Esos que están allí son otros fascinantes. Estos construyen sus tiendas de campaña en la vegetación. Estos murciélagos comen fruta. Comen fruta con semillas muy grandotas. ¿Se acuerdan? Todos han probado la ciruela mexicana del huesote. Bueno, ellos son felices. Y es un árbol muy importante para los bosques tropicales mexicanos. Pues estos nos están haciendo el favor de que acumulan docenas y cientos de semillas abajo de cada tiendita de estas. Entonces, nosotros estamos trabajando con los que trabajan con la restauración de las selvas y les decimos, pues los murciélagos ya hicieron su trabajo de estar recogiendo semillas. Ya nada más vamos a las tiendas, recogemos esas semillas, las ponemos en almácigos a germinar y esos son los árboles que estamos usando para replantar los bosques tropicales de México y toda América Latina. Y finalmente, ¿qué podría decirles yo como mexicano si pudiéramos pensar en un momento que sin murciélagos no hay tequila? Está duro el panorama, ¿no? Resulta aquí que los murciélagos son los polinizadores por excelencia de los agaves tequileros, agaves mezcaleros, agaves pulqueros, raicilla, bacanora, todos los productos del agave se los debemos a que los murciélagos han estado polinizando estas plantas por más de 10 millones de años. Esa es una flor de agave y vean cómo los murciélagos son tan amigables que piensan que yo soy parte de la flor y me quieren polinizar. Ahí viene, ya vieron, casi se me cuelga aquí ¡Ay, este no es, ay, este no es! Así es que yo creo que con este interludio ya gané a algunos adeptos a los murciélagos, ¿sí o no? Eso es todo. Muy bien.

26:45
Ignacio. Hola, Rodrigo, mi nombre es Ignacio y muchas gracias por compartirnos tu pasión y tu conocimiento. Mi pregunta para ti es, ¿qué podemos las personas aprender del reino animal y específicamente de los murciélagos?

27:05
Rodrigo Medellín. Muy bien, muchísimas gracias, Ignacio, por esa pregunta. El reino animal es el reino al que nosotros pertenecemos, somos parte de él, pero nos hemos olvidado de esa conexión. Hoy sabemos mucho más que en cualquier momento en el pasado respecto a lo importante y lo necesario que son los murciélagos, pero también hay mucha desinformación. Yo creo que yo no he trabajado nunca más duro que en los últimos cuatro años para defender a los murciélagos de una serie de acusaciones completa, total y absolutamente falsas que son referentes a la pandemia de la COVID. Los murciélagos no solamente no son los responsables, sino que además tienen la posible cura en ellos. No hay animal que tenga un sistema inmune más robusto que los murciélagos. Los murciélagos no se enferman, es muy difícil encontrar un murciélago enfermo. Su capacidad de recuperación frente a infecciones de bacterias, de virus, de hongos, etc., es verdaderamente asombrosa. Hoy tenemos proyectos en Uganda, en Colombia, en México, en Kenia y varios otros lugares donde estamos estudiando el sistema inmune de los murciélagos para extraer esas lecciones de cómo funciona su sistema inmune y fortalecer nuestro sistema inmune.

 

Entonces va a ser gracias a ellos que vamos a vivir más, que nos vamos a enfermar menos,

que vamos a tener menos problemas de salud, gracias al sistema inmune de los murciélagos. Necesito por favor un par de voluntarios, por favor. Pasen para acá. Bienvenidas. ¿Usted cómo se llama?

29:24
Alina. Alina

29:25
Rodrigo Medellí. Alina. Bienvenida Alina y…

29:26
Violeta. Violeta

29:28
Rodrigo Medellín. Violeta. Bienvenidas Alina y Violeta. Les voy a pedir, porque mucha gente me pregunta, «¿Cómo capturar a los murciélagos? Yo los veo por allá volando, allá arriba. ¿Cómo le haces para capturarlos?» Aquí les vamos a hacer la demostración. Para eso vamos a pedirles la ayuda a Violeta y Alina. ¿Verdad? ¡Qué quiúbole! ¡Qué quiúbole! No venía preparado el biologuito. Ok. Entonces, Alina me vas a ayudar con este poste. Lo vas a sostener aquí. Y tú, Violeta, vas a sostener éste así. Y luego vamos a sacar el instrumento mágico. La red para capturar murciélagos. Alina, te voy a pedir, exacta… ¡Ya le sabes! ¡Tú eres bióloga! Nada más sosténlo en este ángulo. Así. Así lo vas a sostener. Vamos a abrir la red. La red es básicamente… Hagan de cuenta que es una red de pesca, pero se pone en el aire. Y esto lo que hace es que los murciélagos, que se descuidan, porque ustedes saben que los murciélagos tienen un sonar muy fino, van a tropezarse con esta red y van a quedar atorados allí. Y entonces va a llegar Medellín y los va a agarrar. Y los vamos a separar a esta distancia, más o menos aunque lleguen al suelo, no le hagas. Y te voy a pedir, Alina, que camines para allá, hasta donde yo te diga, un poquito más, un poquito más, un poquito más, un poquito más. ¡Qué maravilla es poner una red aquí que está limpio el piso! Porque ustedes imagínense hacer esto en el bosque, donde hay hojarasca y todo eso. Cuando mis alumnos hacen esto, les pongo unas golpizas, porque esto no se debe hacer, que no toque la red el suelo. Ahora, Violeta, sigues tú. Igual, así, mira, así. Perpendicular al plano de la red. Y este va a ser el primero. Originalmente, estas redes eran de seda japonesa, pero ya hoy son de nylon. Y son muy, muy, muy finitas. Y sí hay algunos murciélagos que la detectan, pero muchos no la detectan, y entonces podemos usar esa falta en su sistema de radar para capturarlos. Y lo que vamos a hacer aquí es, precisamente, demostrar esto. Vete para atrás. Y un pasito más para atrás, Alina, por favor. Y ahora, otros pasitos más para allá, por favor, Violeta. Para allá, para allá, para allá, para allá, para allá. Más, más, más, más. Ahí está la red de los murciélagos.¿Ok? Ahora les voy a mostrar, les voy a mostrar cómo funcionan con la ayuda de mi asistente. Viene volando el murciélago así, muy quitado de la pena. Se choca con esto y cae allí. Vean la bolsa que arma este tensor con el tejido laxo de la red. Entonces llega Medellín, «Ay, mira, es una especie tal y cual, y no sé cuánto, y está bien bonito, y tiene orejotas». Y ya lo sacamos. Ahí está. Ese es el secreto de cómo capturar murciélagos en el medio natural. ¿Se acabó? ¿Les gustó? Muy bien.

33:40
Cristina. Hola, Rodrigo, mucho gusto. Soy Cristina Aguila. Y te iba a decir que te ves desde siempre como un niño muy curioso, pero creo decirte que sigues siendo muy curioso. Y mi pregunta es, ¿cómo fue esto? ¿Por qué crees que fue así? Y mi segunda pregunta va hacia la niñez. ¿Cómo crees que podemos impulsar esto a los padres, hacia nuestros hijos, a nuestros sobrinos, a la niñez en general?

34:03
Rodrigo Medellín. Esta curiosidad que yo afortunadamente creo que he mantenido, es innata en los seres humanos. Todos los seres humanos al nacer somos científicos. El niño que está tirando las cosas de la mesa y que ve y vuelve a suceder, y vuelve a tirar cosas y vuelve a suceder, está haciendo el método experimental exactamente lo mismo que hacemos nosotros. Y así aprendemos del mundo. La niña que va gateando en el piso y ve una piedrita y la toma y se la mete, es la misma historia. Eso después se convierte en curiosidad de tomar lombrices del suelo y metérselas en la bolsa, para horror de los papás, muchas veces. Ese horror de los papás es el que tenemos que evitar. Buena parte de la posibilidad de que yo mantuviera esa curiosidad se la debo a mi hermana, a mi hermana mayor. Ella fue la que me trajo mi primer microscopio y se puso a ver alas de mosca en el microscopio conmigo. Ella me compró mis primeros libros de animales. Ella me llevaba al zoológico. Ella todo, todo el tiempo que mis padres querían aquellas porquerías fuera de su vista. Mi hermana era la que decía, «No, espérate, espérate, vamos a darle un lugarcito a Rodrigo para que tenga allí sus cosas». Y yo tenía una colección de insectos y tenía bichos en alcohol. Bueno, yo tuve, y esto no lo recomiendo a nadie, tampoco se trata de tener animales vivos en tu casa todo el tiempo, pero yo tenía serpientes de cascabel, tenía alacranes, tenía arañas, tenía murciélagos, todo en la casa y mis papás me aguantaron. Y mi hermana me impulsaba, me estimulaba. Pero el mantener esa curiosidad viva desde que nace el bebé hasta que tiene mi edad o más, es absolutamente esencial. Yo quiero decirles aquí, es una reflexión un poco filosófica, pero es más real hoy que nunca antes. Tenemos que volver a enamorarnos de la naturaleza. Hemos perdido ese vínculo con la naturaleza. Estamos metidos en nuestro celular, en nuestra compu, en nuestra… Y nos olvidamos de ver el mundo natural alrededor de nosotros. Es ya cada vez más difícil encontrar familias que se van de día de campo y que hay un niño o una niña que están viendo las abejas en las flores o el niño que está juntando flores porque le gustan las amarillas y las rojas. Bueno, ese tipo de conexión con la naturaleza se está perdiendo. Y todas y todos aquí tenemos algo que hacer para rescatar ese vínculo, ese amor con la naturaleza y entonces dedicarnos a promoverlo, a propagarlo con vecinos, con amigos, en la oficina, en la casa, con la familia, todo el mundo. El mundo sería bien diferente si todas y todos tuviéramos el mismo nivel de amor por la naturaleza.

37:56
Zoe. Hola, Rodrigo. Mi nombre es Zoe. Gracias por estar aquí, por compartirnos tanto.Tengo dos preguntas. Sabemos que trabajar para el ecosistema es un trabajo a largo plazo donde los resultados no suelen verse de manera inmediata. ¿Cómo te mantienes motivado? Y la segunda, ¿hay ocasiones en las que hayas visto este impacto positivo de tu trabajo de una manera más clara e inmediata? Gracias.

38:22
Rodrigo Medellín. Muchísimas gracias, Zoe, por la pregunta. Muchos profesionales de la conservación tenemos la convicción absoluta de que nuestro trabajo tiene que impactar políticas públicas. Yo he tenido la suerte de que hemos hecho muchas cosas que han beneficiado a grupos indígenas que han sido adoptados como leyes federales en México, que han resuelto problemas de conservación en muchos sistemas,en muchas regiones, en muchos tipos de ecosistemas en México. Por ejemplo, y aquí tengo que ser muy claro con ustedes, hay un grupo indígena del noroeste de México, el grupo indígena Konkak, también llamados seris, que son los propietarios de una isla. La isla Tiburón, la isla más grande de México, que está en el mar de Cortés. Ellos, en esa isla, tienen una población enorme de borregos y marrón, este borrego con unos cuernos gigantescos, ¿verdad? En los 90´s estábamos trabajando, unos amigos y yo, en esa isla, viendo cuántos borregos había en la isla. Hay más de 600. Trabajamos con la comunidad konkaak para decirles que ellos podrían beneficiarse de una extracción, de un aprovechamiento muy limitado de dos animales, dos machos muy viejos, con los cuernos más grandes, la cornamenta más grande. Si permitieran esa cacería de dos animales de más de 600, resultó, para no hacer el cuento muy largo, que nos llevamos al jefe konkaak y a su ayudante a una subasta, donde se subastan cacerías de diferentes animales. Yo di una presentación, di una charla sobre la isla Tiburón, sobre los konkaak, sobre cómo viven. Son aproximadamente 800 Konkak, de ellos el 40% es diabético, tienen una expectativa de vida de 50, 55 años, una mortalidad infantil muy alta, drogas entre los jóvenes, etc. Dijimos, «¿qué quisieran ustedes hacer si tuvieran dinero?» Y nos dijeron, «bueno, necesitamos una dietista que venga cada mes ayudarnos a controlar nuestra dieta, necesitamos un desayuno para cada niño, necesitamos un salario para cada anciano seri».

 

Y yo agregué el tema de que yo, desde el inicio de ese proyecto, empecé a trabajar con siete seris jóvenes, para que ellos tomaran el control del proyecto, pero yo los tenía que entrenar, que capacitar. Resulta que llega la subasta, 200 mil dólares por un animal, 195 mil dólares por el segundo. La comunidad konkaak nunca había tenido esta clase de dinero, jamás en su historia, pero esto determinó un impacto positivo tal que me da muchísimo gusto contarles que el año pasado me buscan por redes sociales un konkaak que me dice, «oiga, mire, yo soy yerno de don Nacho Barnett», a quien le mando un gran saludo, Nacho, ojalá y estés viendo esto en algún momento. Nacho era el jefe seri en esos años y me dijo, su yerno me dice,»la esposa de Nacho falleció hace un mes y Nacho está todos los días». Dijo, «es que ya no voy a ver a Rodrigo Medellín, no voy a ver a mi amigo Rodrigo, quiero verlo, quiero verlo, quiero verlo, pues vamos a la comunidad». Y me llevo a mis alumnos. Y me reciben el equipo seri que yo entrené en los 90, muchachos de 22, 25, 27 años, hoy ya señores bastante mayores, y me reciben y me cuentan su historia cada uno. Y uno me dice, «pues mire, yo tuve tres hijas que se querían dedicar a ser doctoras o a ser enfermeras y yo no tenía dinero para mandarlas a la escuela, el dinero del borrego permitió que mis hijas sean doctoras todas». Y luego otro me dice, «mi hijo, que cuando estábamos en el proyecto con usted tenía ocho años, hoy es biólogo por el dinero del borrego y él es el que está manejando el programa». Y no solo eso, esa población de borregos hoy es la fuente para recuperar otras poblaciones de borrego en Chihuahua y en Coahuila, estados en donde se había perdido esa especie, gracias a la determinación de un grupo indígena y al apoyo que le pudimos dar como académicos, de manera que hoy el borrego está mejor y los seris están mejor.

 

Para continuar con tu pregunta, Zoe, ¿por qué es nuestro trabajo relevante? ¿Cómo lo podemos convertir en algo realmente tangible en beneficios para los mexicanos? Ya hablé un momento de que el tequila y el mezcal lo tenemos gracias a los murciélagos porque los murciélagos polinizan el agave, pero durante los últimos 100, 150 años la industria del tequila no ha permitido que una sola planta de agave florezca, porque la biología de los agaves es que van creciendo, y todos hemos visto magueyes, van creciendo y creciendo y creciendo y cuando ya están bien grandotes, avientan el quiote, avientan la inflorescencia. Y ahí es donde invierten todos los azúcares que han estado acumulando año tras año en un solo evento reproductivo sexual, abren sus brazos, abren sus flores, llenan de néctar y de polen esas flores, llegan los murciélagos, se sacian de néctar, quedan completamente cubiertos de polen que se llevan a otras plantas de agave y ahí está la polinización. Pero los que producen el tequila y el mezcal se dieron cuenta de que para maximizar la cantidad de alcohol que produces, tú lo cosechas antes de que florezca. Le niegas la posibilidad al agave de reproducirse sexualmente y la única que les queda a los agaves es los hijuelos que crecen en la base de la planta madre, que son clones, son copias genéticas exactas de la planta madre, es con lo que replantan los campos.

Así entonces están perdiendo toda la diversidad genética. Hemos medido que los campos agaveros de tequila ya perdieron más del 99.9% de la diversidad genética que tenían. Pues no hay ninguna sorpresa de que los agaves están siendo afectados por plagas por enfermedades, por el cambio climático, pero claro, pero cómo no. Evidentemente lo que está pasando aquí es que sin diversidad genética le negaron la posibilidad a ese agave de adaptarse a esas condiciones. Entonces invitamos a la industria a que empezaran a permitir que solamente el 5% de los agaves florecieran y con eso la UNAM y el Tequila Interchange Project, un grupo de productores de tequila que están comprometidos con hacer esta industria sustentable, les damos un reconocimiento que va en la botella de tequila o de mezcal y le dice al consumidor «este es un tequila amigable con los murciélagos, «bat friendly» y con eso ya estamos resolviendo el problema del agave. Imagínense lo que esto representa para los mexicanos, dado que parte importante de nuestra identidad es el tequila y el mezcal, estamos rescatando ese tequila y ese mezcal con la ayuda de los consumidores, con la ayuda de los murciélagos y la ayuda sobre todo de los productores comprometidos con una industria del tequila sustentable. Gracias

47:37
Nadia. Hola Rodrigo, muy interesante escucharte, muchas gracias. Yo soy Nadia y quiero preguntarte cómo puedo aportar mi grano de arena para poder conservar nuestro mundo, incluso si quisiera dedicarme a ello, ¿qué tendría que hacer?

47:53
Rodrigo Medellín. Todas y todos tenemos algo que hacer. Simplemente, con lo que hemos hablado aquí, ya se dieron cuenta de que hay algunos temas, algunas acciones que podemos tomar, algunos cambios que podemos introducir en nuestra vida que van a hacer más sustentable el planeta porque van a hacer nuestro impacto en el planeta más positivo. Ejemplos. Yo ahorita llevo 10 años de no tomar agua en una botella de agua individual de plástico. Cada uno de nosotros tiene sus botellas que nos han dado en las reuniones, en los congresos, en la etcétera. Nada más llenarlos en el garrafón grande y ya con eso ya ahorramos un montón de plásticos. Y la verdad es que no me he muerto de sed. Aquí sigo y voy a seguirle así.

 

A veces me invitan a reuniones de sustentabilidad. Y lo primero que veo es botellas de agua individuales de cada persona, pero digo, ¿dónde está la sustentabilidad? Por Dios. Segundo,  pensemos en nuestra dieta, ¿qué es lo que comemos y de dónde viene lo que comemos? Yo voy a la central de Abastos y le pregunto al señor de las manzanas, oiga, ¿de dónde son esas manzanas? Y me ve como loco, ¿no? Ay, sí, mire, están a 50 pesos el kilo. ¿Las quiere o no? No, le digo, si hay manzanas de Puebla, de Zacatlán de las Manzanas, aunque estén un poco picaditas que les cayó el granito, no importa, esas son las que quiero, porque además la agricultura mexicana también se está muriendo porque nosotros queremos a fuerza, la manzanota roja de Chile que viene quemando diésel desde Chile hasta acá. No lo necesitamos.

 

En el mismo sentido, yo llevo un montón de años, más de 12 años,  de no comerme un solo camarón. La pesquería del camarón es de las más desastrosas para el mar. Cada kilo de camarón representa 40 kilos de animales del mar extraídos, muertos, desperdiciados y regresados al mar. Ahora ya hay algunas alternativas sustentables de pesca de camarones, en donde van dos catamaranes y llevan una red a media agua, y solamente se pescan los camarones que se quedan en esa red, porque ustedes saben que para pescar el camarón es arrastrar, arrastrar con todo lo que está en el suelo del mar, eso es lo que le dan la torre. Entonces ya en los supermercados hay de estas alternativas sustentables de camarón.

 

Y otro último ejemplo, el sistema Kutzamala que le da el 30% del agua a la Ciudad de México está seco. Ahora imagínense qué va a pasar cuando el sistema Kutzamala se acabe. Y por más que llueva, no se llena porque le seguimos sacando acá. Ay, me fue de la cachetada ayer, me voy a echar una ducha de media hora, ábrele a la regadera y venganos tu reino. Y claro, ahí se van litros y litros y litros de agua. Entonces, lo que yo he estado haciendo es recortar el tiempo que me paso en la ducha. Hoy, voy en cuatro minutos. Y la verdad es que no apesto. Creo que no apesto. Y además también es muy cierto que yo tengo cierta ventaja, ¿verdad? Entonces, realmente aquí de lo que se trata es de que nadie puede vivir, continuar viviendo su vida, sin introducir algún cambio.

 

Estos son tres ejemplos, pero hay miles de cosas que podemos hacer. ¿A dónde nos vamos de vacaciones? ¿Separamos la basura o no? ¿Reducimos el consumo de plásticos o no? Hay mil cosas que podemos hacer. Lo único que no se vale es seguir viviendo nuestras vidas como las hemos vivido hasta hoy sin introducir ningún cambio.  Les invito a todas y a todos a que piensen, un cambiecito chiquito no quiere decir que nos vayamos a vivir a una cueva, porque ni así, ni así. Todos podemos hacer algún cambio para mejorar nuestro impacto en el mundo y el mundo nos lo va a agradecer.

 

Hoy es el mejor momento de la historia de la humanidad para hacer ese cambio. ¿Por qué? Porque tenemos, sabemos exactamente lo que hay que hacer. Sabemos qué cambios tenemos que realizar en nuestras vidas. Tenemos la ciencia de nuestro lado, tenemos los hechos, la información la tenemos clara de cómo debemos hacer esos cambios. Y tres, las generaciones actuales y las que vienen detrás están comprometidísimas con un mundo sustentable. Este sentimiento que tenemos ahorita aquí espero que se convierta en un sentimiento de urgencia, que no es un sentimiento de pesimismo, de que ya no hay ninguna esperanza. Eso es falso. Pero eso depende de que todas y todos hagamos nuestro trabajo. Pero eso depende de que todas y todos nosotros hagamos parte de nuestro trabajo, que trabajemos en conjunto con la industria, con la iniciativa privada, con la academia, con las organización civiles de la sociedad y con el gobierno. Y que todos estemos trabajando así va a ser la clave para que este mundo verdaderamente sea sustentable. Yo sigo trabajando y seguiré trabajando toda mi vida en este tema de encontrar soluciones a problemas que afectan al mundo. Yo ya voy de salida. Yo ya debería yo estar jubilado, como dicen mis alumnos, tú eres otro tipo de «nini», porque tú ni te jubilas ni te mueres. Pues no, sorry, no tengo planes ni de jubilarme ni de morirme. Y voy a seguir trabajando, impulsando la esperanza, impulsando el potencial de que cada uno de nosotros haga cambios en su vida para que el futuro del mundo, especialmente de México, sea cada vez más brillante, más sustentable y y más positivo. Entre todos podemos cambiar el futuro del planeta.

55:28
Bárbara. Hola Rodrigo, yo soy Bárbara Moreno, mucho gusto. Quería saber sobre cuáles son las investigaciones y proyectos sobre la biodiversidad que más te emocionan.

55:38
Rodrigo Medellín. Muchas gracias Bárbara por la pregunta. Esa pregunta es como decirme cuál es el hijo al que más quieres. Está difícil, está difícil, pero hay proyectos que mis alumnos y yo constantemente estamos creando nuevo conocimiento, hacemos preguntas nuevas y por eso es que estoy tan contento aquí hoy con ustedes, porque eso es lo que me mantiene vivo. Por ejemplo, hemos estado trabajando los últimos años con murciélagos que, échense esta,brillan bajo la luz negra, a que no se le esperaban. Ahora que salgan de aquí busquen murciélagos ultravioleta y ahí van a encontrar mis investigaciones, pues somos los únicos que hemos encontrado esto en el mundo. No sabemos para qué sirve, pero en eso estamos. Imagínate qué bonita curiosidad, es como otra vez el niño que está queriendo entender cómo funciona la gravedad, pues yo quiero entender cómo funciona la luz ultravioleta en las patitas de los murciélagos. Otra cosa que recientemente hicimos, y a lo mejor por ahí lo vieron en las noticias, es que en el bosque de Chapultepec, uno de los parques urbanos más antiguos, más ricos en cultura, historia, biodiversidad, más visitados, 10 millones de personas al año, hicimos una cosa que se llama el BioBlitz. El BioBlitz literalmente quiere decir una tormenta de datos biológicos. Durante 24 horas, del lunes pasado a las 8 de la mañana al martes a las 8 de la mañana, juntamos a más de 200 expertos de la UNAM a que fueran a catalogar todo lo que está vivo en Chapultepec. Plantas, animales, hongos, lagartijas, lombrices, arañas, serpientes, peces, ardillas, enredaderas, árboles, hierbitas, todo. Tenemos unos datos que no se la creen. No se la van a creer.

 

Hasta antes de que empezáramos este programa, estuve checando, tenemos ya 180 especies

de plantas y animales que viven en Chapultepec. Y no estoy hablando del zoológico, nada más en el bosque:180. Dentro de ellas, quiero decirles esta primicia. Los expertos en luciérnagas encontraron una especie nueva de luciérnaga viviendo en Chapultepec. ¿Qué otras sorpresas nos esperan ahí? Pues digo, claro, por supuesto, vamos a seguirle. Entonces, este año hicimos la primera sección. Y fueron puros expertos. El año que entra, yo quiero abrirlo a la ciencia ciudadana y que nos ayuden a catalogar todo lo vivo. Que vayan y ayuden a los murciélagos, así como me ayudaron, todo eso. Y lo vamos a hacer en la segunda sección. Y el siguiente año en la tercera. Y la cuarta sección, que es la más nueva, incorporada a Chapultepec, apenas hace dos años, va a ser la más interesante, porque va a tener un montón de plantas y animales, porque es la parte más salvaje, más silvestre de Chapultepec.

 

Así como eso, no tenemos mucho tiempo para seguir avanzando en esto, pero me podría pasar toda la noche platicándoles de proyectos preferidos, consentidos. Estamos trabajando con los murciélagos más grandes del continente americano, unas cosas de este tamaño, más grandes que mi amigo. Que comen pajaritos, ratones y otros murciélagos. Son carnívoros. Viven en las selvas más recónditas del sur y desde allí se van al Amazonas. Y viven además en templos mayas metidos en la selva. Hemos estado estudiando su dieta, hemos estado estudiando sus movimientos, su biología social. Resulta que viven en grupos familiares. El macho, la hembra, la cría del año anterior, la cría de ese año y uno o dos tíos o tías más que están allí de ayuda. Nada más.

 

Imagínense lo bonito que está esto, que de pronto una hembra está cargando a su bebé. Imagínense esto. El bebé pesa el 70% de lo que pesa la mamá. A ver, cárguense su bebecito que pesa el 70% de ustedes. Bueno, pues esa hembra está metida en el templo cargando a su bebesote y el bebé además mamando. Y la hembra está desesperada porque así no puede volar, no puede salir del templo, no puede irse a cazar. Está hambrientísima pensando en los taquitos al pastor. A las 3 de la mañana llega un macho con una rata en la boca, suculenta y deliciosa, y se la pasa a la hembra. Y ahí tenemos los videos donde está el macho dándole de comer. Es lo que hacemos los humanos también. La mamá o el papá que se tuvieron que quedar a cuidar a los hijos, pues el otro les lleva a que comer. Pero eso no sabíamos que hacían los murciélagos. Y ahí están haciéndolo, ¿no? Otro detalle de esta especie es que en su dieta apareció un loro,un loro de este tamaño, del tamaño del murciélago. Todavía no entendemos cómo es posible que un murciélago de este tamaño acabó comiéndose a un loro de este tamaño. Ese loro se despierta o se da cuenta de que se lo van a comer, le decapita al murciélago en tres patadas con ese pico, y sin embargo ahí está.

 

Aquí estoy liberando al murciélago que capturamos el lunes en Chapultepec durante este BioBlitz. Es un murciélago insectívoro que cayó en estas redes y al sacarlo, pues yo ya me doy cuenta, ya conozco a las especies, pero mis alumnos no. Entonces, jóvenes, aquí está el libro, aquí está el murciélago, díganme qué especie es. Y pobrecitos, porque sí luchan mucho, porque sí, no es tan fácil, sobre todo este grupo de murciélagos es bien difícil de identificar, pero eventualmente lo hicieron y de eso se trata, para eso están en mi laboratorio, para que yo les enseñe todo esto, ¿no? Pero es un murciélago insectívoro de los que comen los zancudos, las polillas, etcétera. Si ustedes quieren ver estos murciélagos en acción, es bien fácil y sí se puede hacer, se puede hacer en esta temporada. Vayan a cualquier parque o a Alameda o Plaza de la República, porque allí hay, en donde haya luces blancas iluminando el parque. No luces amarillas, porque las luces amarillas no atraen tantos insectos. Las luces blancas, van a estar los bichos ahí volando como locos.Denle dos, máximo tres minutos y van a ver a los murciélagos volando así, comiéndose las palomillas. Es un espectáculo bellísimo. En la oficina del jefe de gobierno de la Ciudad de México hay una colonia de murciélagos y no tiene visos políticos es lo que estoy diciendo, no me refiero a eso. Me refiero a que efectivamente hay una colonia de 5000 murciélagos que comen insectos. Y en la plaza, en el mero Zócalo, ustedes pueden ir a echarse una caminata en la tarde, en la noche, las luces de la catedral iluminando la plaza, ahí están los bichos, las palomillas, los mosquitos volando alrededor. Denle unos momentitos, un par de minutos y van a ver a los murciélagos comiendo. Es un espectáculo que vale la pena. Entonces, hay muchas más preguntas que lo que me va a alcanzar la vida responder. Pero eso es lo que me hace feliz. Tengo preguntas para los próximos 200 años y sigo buscando estudiantes y las puertas están abiertas. Gracias.

1:04:34
Francisco. Rodrigo, soy Francisco. Antes que nada, muchas gracias por todo. La pregunta es, ¿qué beneficios tiene cuidar el medio ambiente y en contraposición, a qué nos podremos ver afectados en caso de no hacerlo?

1:04:48
Rodrigo Medellín. Esta pregunta es absolutamente medular para todos los mexicanos. Ya estamos viendo los primeros indicios de qué puede pasar si no hacemos lo que tenemos que hacer de introducir estos cambios, de cambiar las políticas públicas, de asegurar que el futuro sea sustentable. Estamos viviendo tragedias verdaderamente que te rompen el corazón en todo el mundo y México no es la excepción. Tenemos las hambrunas en Haití, tenemos las hambrunas en Etiopía. Esos países perdieron todos sus bosques, casi toda su biodiversidad, que es lo que sustentaba los procesos de producción de alimento y hoy ya no los tienen. Tenemos la evidencia clarísima, no muy lejos de la Ciudad de México, en Chalco. Chalco es parte de uno de los lagos más grandes que existían en el México Tenochtitlán. Entonces es de la parte más baja de la cuenca del Valle de México. Como es la más baja, pues ahí se acumulan las aguas.

 

Las autoridades hace 30 o 40 años construyeron un sistema para bombear las aguas excesivas y sacarlas del Valle de México a través de un enorme túnel. ¿Qué sucedió? «Ay, ya me acabé mi botella de agua poza, a la calle». «Ay, la envoltura de las galletas, a la calle». Y se va acumulando, yo dos o tres basuras, tú cuatro o cinco, tú otras dos. Van acumulándose toneladas de basura que terminan bloqueando ese conducto. Hoy ese conducto es el que está bloqueado. Tiene 50 metros de basura que están impidiendo que las aguas negras salgan. Pero ahí es donde todos tenemos algo que hacer. En primer lugar, cuidar nuestro consumo de agua. En segundo lugar, trabajar de la mano con nuestras autoridades para asegurar que el consumo del agua, el uso del agua, la captación de agua sea real y sea sustentable. Ustedes saben cuántos ríos en el mundo existen que hace 100 años estaban tan repugnantes y tan asquerosos como muchos de los ríos que están en la Ciudad de México hoy. El río Támesis en Londres, el Guadalquivir en España, el Ródano, el Duero, todos esos ríos hace 100 años estaban muertos. Muertos. Hoy, por decisión de la población con las autoridades, están rescatados, están vivos. No quiere decir que estén prístinos intactos, pero hay biodiversidad, hay peces, hay aves, está fluyendo el agua, el agua está limpia. Esa es la asignatura pendiente que tenemos en México. Tenemos que asegurar que el trabajo para rescatar los ríos mexicanos sea de la mano con las autoridades y asegurar que tengamos esos ríos fluyendo limpios y claros. Todos y todas tenemos algo que hacer.

1:08:27
Rodrigo Medellín. ¿Quién conoce a ese señor? ¿Quién es? No, es David Attenborough. Es ese, es ese señor que me puso el Batman de México. Digo, el conocer a este señor casi me hago pipí. O sea, imagínense, yo lo he admirado toda mi vida y en 2012 me hablan para el premio que se llama el premio Whitley Oro. Y para ese premio, este señor, el de los documentales de la BBC de Londres, hace un videíto que está también en las redes, en donde él me presenta. Y ya nada más escuchar la voz de este señor decir «Rodrigo Medellín» ya se me caían los calzones. Y luego ahí voy a Londres a recibir el premio y le digo a Edward Whitley, el que organiza todo, le digo «oye, ¿y crees que va a venir David a la ceremonia?» Me dice «pues quién sabe, porque ya es muy mayor, yo lo invito siempre. Hay veces que viene y hay veces que no». Pues estoy en la recepción pre-ceremonia y por el rabillo del ojo veo a David Attenborough que se mete al auditorio y yo me convertí en el más patético fan de Justin Bieber. O sea, olvídense, olvídense, me daba yo pena ajena. Bueno, ya entramos, está la ceremonia, yo tengo a Edward Whitley, la princesa Anna y David en la primera fila. Mis rodillas así, ¿no? Bueno, ya doy mi aceptación, mi speech, no sé qué, la princesa sube, me da el premio y luego vamos a la recepción post-ceremonia y yo quiero conocer a este señor. Entonces me voy a acercar así y llegan cinco viejitas inglesas y lo agarran. Y las viejitas… Y David así. Hijo, yo decía, no manches. Y aquí salió el chilango. Me abrí paso y entonces le digo, pues es que David, yo te tengo que conocer, yo te he admirado toda mi vida, eres mi héroe, eres mi “role model”, yo cuando sea grande quiero ser como tú, le decía yo. Tú has cambiado el mundo y quién sabe qué, y David, pero llevaba yo mi arma secreta bajo el brazo. Acabábamos de publicar un libro sobre esos murciélagos que construyen tiendas, que son 25 especies desde México hasta Brasil. Y tienen fotos y son ocho diferentes arquitecturas, unas que, por ejemplo, es una hoja de palma así redonda, los murciélagos le mueren y le dan un poco de calor, y ahí están abajo. Y esa que vieron que se llama bote invertido, porque se parece un bote al revés, y así son ocho arquitecturas. Y todo está con fotos, todo está en inglés y en español y todo. Y ahí salió el David, a temor a lo que todos conocemos y empieza a resurgir su energía, me dice, no es posible, esto es una maravilla, cuéntame más, y no sé qué, seguimos hablando, y me pasé dos horas hablando con este chico, nada más él y yo. Al día siguiente hay una cena en casa de Lord, no me acuerdo qué cosa, y llega el equipo de la BBC, y se presentan conmigo, y me dicen, pues, no sabes qué clase de favor nos hiciste, porque David nunca viene ya a reuniones de consejo, vino esta mañana y nos dijo, vamos a hacer un documental con este señor, y pues adelante, vamos a hacerlo, y pues ya, tenemos presupuesto, tenemos personal, tenemos equipo, todo esto fue en 2012, en abril de 2012. Y en 2013 me pasé cuatro meses siendo seguido por la BBC, desde Chiapas hasta Sonora, desde Yucatán hasta Jalisco, por todos lados, mostrándoles diferentes cosas de monedas, y entonces se va a postproducción y me habla el director y me dice, oye, yo quiero que David lo narre, tú le podrías decir, yo le digo, ¿cómo? ¿Tú le podrías decir? Pues tú eres el de la BBC, no me amueles. No, pero dile tú, que quiere que hablo con su hija Susan, que es una mujer lindísima, le digo, oye, que mira, que tú me conociste en la entrega de los premios, no sé qué, será que tu papá puede… déjame pasártelo, y me lo pone en el teléfono, y me dice, oye, pues podría… Sí, claro, con muchísimo gusto. Y él es el que me puso «The Batman of México»  por ese documental que se llama «The Batman of México». Búsquelo en Internet y ahí está.

 

Yo soy un absoluto convencido de que hoy es el momento de máxima esperanza, de que el mundo se pueda ver como un monumento de máxima esperanza para la humanidad. Hoy tenemos todos los elementos que necesitamos para hacer el futuro verdaderamente sustentable, para que cada uno de nosotros se incorpore a la lucha por hacer de un mundo, el mundo actual que tenemos, un mundo verdaderamente sustentable donde podamos vivir en armonía con la naturaleza. En primer lugar, tenemos que volver a enamorarnos de la naturaleza. En segundo lugar, hoy tenemos toda la ciencia, todo el conocimiento, y además sabemos exactamente lo que tenemos que hacer para resolver los problemas desde el cambio climático hasta las inundaciones, la deforestación, la pérdida de especies. Sabemos exactamente qué es lo que tenemos que hacer. Lo que nos falta es la voluntad de actuar de cada uno de nosotros. Aquí es donde entra cada uno de los que estamos aquí y nuestras redes y las redes y las redes. Si todos nosotros pensamos que hay algo que podemos hacer, si todos nosotros incorporamos cambios en nuestra vida diaria, las generaciones de jóvenes que tienen ahorita 30, 40 años son los que van a iniciar ese cambio y las generaciones posteriores son las que los van a terminar, porque sabemos qué hacer, sabemos cómo hacerlo y tenemos la convicción todos de cambiar por el bien del mundo, por el bien de la biodiversidad. Muchísimas gracias a todas y a todos. Gracias.